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Sábado 06 de abril de 2019

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Revista Tu Espacio

SALUD

El aprendizaje como una forma de evitar riesgos en la adolescencia

06 abr 2019

Por: Soledad Antezana - exclusivo para Tu espacio - Licenciada en Enfermería - Salud del adolescente

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Todas las personas construimos un conjunto de conocimientos, valores, destrezas, actitudes, todo ello sirve de base para que la persona siga un desarrollo de conducirse en forma autónoma, regulando su propio aprendizaje.

Estas competencias se desempeñan y se dominan, influye para que el ser humano interactúe consigo mismo, con los demás y todo su entorno.

Dentro de la satisfacción de una necesidad básica de aprendizaje, se busca tres dimensiones en base a prioridades básicas, como el saber, el saber hacer y el ser. Desarrollando estas tres dimensiones para aplicarlas, tomaremos en cuenta que: El saber está relacionado con los conocimientos teóricos que necesitamos. El saber hacer, se refiere a todo cuánto hacemos, es decir, un conocimiento práctico. Finalmente, el ser, representa a las actitudes y valores que desarrollamos para determinar competencias.

Todos estos aspectos debemos tomar en cuenta en el momento del proceso de aprendizaje.

La persona tiene que verse como la constructora de su propio aprendizaje y además desarrollarse en base a sus propias aspiraciones. Aprender de sus experiencias y de su vida cotidiana. La persona aprende desde el estudio, construyendo su aprendizaje a partir de su propia realidad, ya sean éstas personales, sociales o culturales madurando consigo mismo y con los demás.

La persona tiene que verse como la constructora de su propio aprendizaje y además desarrollarse en base a sus propias aspiraciones. Aprender de sus experiencias y de su vida cotidiana. La persona aprende desde el estudio, construyendo su aprendizaje a partir de su propia realidad, ya sean éstas personales, sociales o culturales madurando consigo mismo y con los demás.

Con ello muestra la representación que hace, sus prácticas, sus conocimientos, sus valores, sus actitudes y sus emociones.

Esto servirá para el intercambio de saberes acumulados en función de actuar en bien propio o colectivamente. Lo que conlleva un intercambio o una interacción con los componentes de un grupo de personas, con criterios diferentes, durante los cuales se puede desarrollar un proceso de reflexión con distintos grupos.

Estos aspectos ayudan a la persona a considerar también la educación para la sexualidad, especialmente si es adolescente y evitar los riesgos propios de su edad.

Contacto: 704 - 10548

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