Voló en pedazos

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"Hija nos moriremos juntos", con esas palabras el exminero Marcelino Hergueta Tapia de 59 años decidió tomar la fatal decisión de partir de este mundo. Intentó llevarse a su esposa con él, sin embargo, la mujer escapó del hogar para luego ser testigo del suceso inesperado.

El suicidio ocurrió en la comunidad de Molloco situada en la provincia Saucarí, al Sudoeste de la ciudad de Oruro, una hora antes que el reloj marcara el cambio de día, según información proporcionada ayer por el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), coronel Manuel Vergara Sandoval.

ANTECEDENTES

La noche del domingo 31 de marzo, aproximadamente a las 19:00 horas, el exminero se trasladó desde la ciudad de Oruro, rumbo a su casa, situada en la mencionada comunidad.

Presumiblemente, agobiado por los problemas que sopesaba, principalmente económicos, es que decidió irse de este mundo e intentó llevarse a su esposa. Por ello, textualmente le dijo: "Hija nos moriremos juntos", sin embargo, la mujer con muchas responsabilidades encima decidió huir de la casa para no morir en complicidad con el marido.

Se escondió, muy asustada, entre los pajonales del lugar y mientras lo hacía, escuchó a su marido que hizo varias llamadas por celular, todas a sus familiares, despidiéndose. Cuando el reloj marcó las 23:00 horas del domingo reciente, una fuerte explosión se escuchó en el sector.

Era Marcelino Hergueta quien había volado en pedazos a consecuencia de la explosión de un cachorro de dinamita. La mujer resignada y pensando en lo peor volvió a su casa. La imagen era de terror y no asimilaba lo que había pasado, sin embargo, debía ser fuerte. Instantes después acudió hasta un funcionario policial que cumplía servicio en la localidad de Copacabanita.

Un poco después de la medianoche, al lugar se aproximó el personal de la División Homicidos de la Felcc - Oruro, a la cabeza del sargento Rubén Sequita con el objetivo de hacer el levantamiento legal del cadáver e iniciar la etapa investigativa, que es de conocimiento del Ministerio Público.

Con los primeros rayos del sol, se pudo apreciar, cómo el cuerpo de Marcelino había quedado destrozado, los miembros del cuerpo literalmente se separaron a consecuencia del explosivo, mientras que las vísceras se esparcieron por todos lados. Es el primer caso de esta naturaleza que se registra en el año.

Fuente: LA PATRIA