Viernes 16 de julio de 2010
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Mientras se trabaja contra reloj para la aprobación de la “Ley Marco de Autonomías” son muchas las contradicciones que se han detectado entre simples sugerencias y absolutas propuestas, las primeras tímidamente esbozadas, en unos casos desde la oposición e inclusive en niveles de la propia bancada oficialista, mientras las otras resultan producto de la imposición ya establecida en la elaboración de los textos de la ley en consideración.
Hay varios “mecanismos” de control que se pretenden aplicar desde el Poder Ejecutivo y en especial el denominado “control social” que es observado con justificada preocupación porque busca ejercer presiones especiales poniendo en riesgo la unidad nacional.
Se anotan entre muchas observaciones algunas puntuales como por ejemplo la vigencia de la denominada “Agencia para el Desarrollo de las Macro regiones y Fronteras” que no es otra cosa -según la oposición- que un súper ministerio que tiene capacidad de decidir cuáles regiones deben desarrollarse y cuáles no, por razones políticas.
Otras posiciones desde la bancada oficial restan importancia a la demanda de los opositores indicando que lo importante será cuidar la soberanía justo en las fronteras que hasta ahora son los sitios olvidados del país, por tanto es necesario que se implementen políticas para “sentar soberanía”.
Fuente: LA PATRIA
