Que no pase lo del gas

En fechas todavía recientes se supo que dos importantísimos recursos naturales de Bolivia y que se define por su carácter en el panorama mundial, como estratégicos fueron otorgados a empresas de nacionalidad China, con toda la pompa y sonaja acostumbrada del gobierno, estos son el hierro del yacimiento del Mutún y el Litio de los grandes Salares de Coipasa y Pasto Grande.

Llama poderosamente la atención, el hecho de que justo en los días previos al aniversario cívico de Oruro se haya dado esa noticia y que todavía en dicha otorgación se afirme tan abiertamente que el litio saldrá exportado como materia prima semi refinada a una; fábrica de baterías en China.

A semejante declaración que para lo peor, ha sido muy ampliamente publicitada por todos los medios de comunicación imaginables; nos preguntamos ¿Qué sigue?, que el hierro del Mutún; ¿Se exportará a una siderurgia de China como hierro esponja? Al parecer tal vez�

Fuera de estas consideraciones de orden estratégico para el país, fuera de que se entregue a una potencia extranjera los recursos naturales, fuera del muy presumible daño irreversible al medio ambiente que provocan estos proyectos extractivistas y mucho más con la participación de súbditos y empresas de China, que muy mala fama tienen en el país sobre todo con el respecto a la madre naturaleza, debemos de hacer un análisis exhaustivo de una premisa sobre un antecedente negativo, la bonanza del Gas Natural, ese gas natural que hace ya muchos años el gran Marcelo Quiroga Santa Cruz a guisa de profecía escribió "el gas que ya no tenemos", haciendo hincapié en la baja de las reservas y el más que probable cierre de los mercados para las exportaciones, esa bonanza que duró 10 años y que el gobierno no pudo, no supo ni quiso aprovecharla para el desarrollo de Bolivia.

Con ese nefasto antecedente de no haber sabido tanto administrar como otorgar una política coherente para el gas, el gobierno nacional, ¿podrá administrar el litio y el hierro?

Cabe hacer una pregunta, muy necesaria a estas alturas ¿podrá ser posible que el gobierno del Movimiento Al Socialismo, pueda establecer una política coherente a la explotación del hierro y el litio?

Por sus acciones, declaraciones y propaganda, vemos con tristeza que muy probablemente, NO puedan, basta con leer cualquier periódico o medio de comunicación masivo y fácilmente nos damos cuenta de que 2.000 abdominales tan vergonzosamente publicitados no son una buena señal de un gobierno serio, responsable y coherente.

La ciudadanía en general, es decir el pueblo boliviano en su totalidad, las diferentes autoridades políticas y administrativas de todos los niveles autonómicos y los representantes del pueblo deben de obrar con su conciencia y prevenir la mala administración, el derroche, el latrocinio y la enajenación perpetua de nuestros recursos naturales, no podemos permitir que el futuro de Bolivia sea hipotecado a un nuevo Imperio.

No, debemos permitir nuevamente que destruyan las esperanzas por un mejor mañana, sinceramente que; NO pase lo del gas.

(*) Asambleísta Orureño