La toma de decisiones

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Aún se tropieza con el uso de métodos anticonceptivos, en adolescentes su uso es muy bajo, en este entorno hay escasa información y educación.

Para ellos, los centros de salud no son tan accesibles, sin embargo, se tiene que considerar que los servicios de salud sexual y reproductiva, no sólo son para adultos o personas casadas, por lo tanto se busca una atención diferenciada, donde el adolescente pueda confiar en la confidencialidad que se le depara que exprese todas sus necesidades como solteros.

Actualmente se quiere reducir el embarazo precoz, tomando en cuenta estos factores de riesgo que se corre con la desinformación. La mayoría de los embarazos precoces, terminan en abortos clandestinos, donde no se da la seguridad ni las condiciones de higiene y la técnica a realizarse.

Todo adolescente tropieza primero, con un aborto incompleto, a esto se suman otras consecuencias como el marginamiento en el colegio o el trabajo, aumentando su problema psicológico.

Es importante la educación para la sexualidad y que desde el conocimiento, puedan llegar a tomar decisiones en beneficio del bien propio. El abordaje que se tenga en el hogar sobre los temas de la salud sexual reproductiva y la sexualidad, harán que de algún modo no conozcan su cuerpo, pero permitirá llegar a tomar decisiones en bien de uno mismo.

Esta educación también ayudará a prevenir las infecciones de transmisión sexual, que es otro riesgo para los adolescentes. El contagio puede darse en las edades de 15 a 19 años.

Lo importante es usar estrategias que nos ayuden a prevenir y a sentirse más informados a fin de evitar todos estos riesgos.

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