Aunque al presentarlo como una solución a los problemas de contribuyentes, la propuesta no fue bien recibida en muchos círculos del orden comercial, tampoco entre los gremiales y con cierta resistencia entre los más cumplidores con el pago de impuestos, la idea del "perdonazo" avanzó, se aplicó y logró sobre todo el objetivo del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN) de mejorar sustancialmente sus recaudaciones.
En realidad, según los observadores del sistema, una marcada preocupación en torno al nivel de recaudaciones impositivas, obligó a buscar canales que mejoren el sistema, pero disminuyendo la presión sobre algunos contribuyentes y bajando la fuerza de algunas sanciones que evidentemente, causaron malestar y una justificada resistencia en los afectados, ante sanciones desmedidas, de montos inequitativos, tomando en cuenta que existe con una alarmante vigencia un numeroso sector de comerciantes que manejando fuertes capitales son activos evasores de impuestos, sin recibir ninguna sanción.
Hay que tomar en cuenta que el SIN, tiene la enorme responsabilidad de obtener ingresos que van directamente al Tesoro General y corresponden a los recursos que el Estado debe utilizar en cubrir los gastos de programas de desarrollo con beneficio social, aunque no precisamente con un orden de equilibrio entre las regiones que "producen" más ingresos por la vía del pago de impuestos, concentrándose tal movimiento en el denominado eje central, con La Paz, Cochabamba y Santa Cruz.
Otro rubro de importante movimiento es el que se genera a través de la Aduana y sus constantes operativos contra las organizaciones de contrabandistas que procedentes de territorio chileno, en gran parte se introducen por rutas alternas de nuestra zona fronteriza, procedentes de puertos chilenos, otro tanto corresponde al Perú y la Argentina y aunque la mayor extensión de frontera nacional corresponde a nuestro país y el Brasil, es menor la circulación de mercadería de contrabando con sello carioca.
Pero de manera general, para el Estado es importante que se mejore la recaudación de impuestos por lo que se planteó al SIN, aplicar un buen programa efectivo que multiplique en determinados plazos el monto de ingresos para el Tesoro General. Surgió entonces, la opción de aplicar un "perdonazo", evaluando que una buena cantidad de contribuyentes en el país se encontraban con cierta mora en el pago de impuestos y por lo mismo existía una reducción de impuestos en las principales distritales.
El perdonazo, se convirtió en una opción legal para recuperar gran parte de las deudas en mora de impuestos ciudadanos y aplicada la norma, el flujo de pago aprovechando varias modalidades permitió una importante recuperación de dinero que de otro modo, se hubiera cobrado, pero con muchas dificultades y poniendo en riesgo la relación de contribuyente y recaudadora.
El último informe al cierre de la última gestión revela que más de 75 mil contribuyentes se acogieron a la Ley 1105 de Regularización de Tributos o más conocida como "perdonazo" permitiendo una recaudación de 1.105 millones de bolivianos (mil ciento cinco), una suma considerable que se encontraba en un estado de inseguridad y sin posibilidades de convertirse en dinero efectivo.
La medida es bien recibida por los contribuyentes, permitiendo que se eviten acciones radicales de sanciones unilaterales y que con la misma vara pueda medirse la voluntad y responsabilidad de los contribuyentes. Queda un implícito pedido de contribuyentes legales, para que el SIN "globalice" la obligación impositiva y suprima centenares de grandes evasores. Será otra forma de ampliar las recaudaciones.
Fuente: LA PATRIA
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