Pesadilla en el Carnaval

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Una verdadera pesadilla fue la que se vivió durante el Carnaval en Oruro. Dos explosiones casi en el mismo lugar, una ocurrida al ocaso del sábado 10 de Febrero, a tan solo una cuadra del lugar por donde se realizaba la Entrada del Carnaval; la segunda tres días después, el Martes de Ch´alla. Entre las dos tragedias, 12 personas perdieron la vida y casi 60 resultaron heridas.

Cuando todo era fiesta el sábado 10 de Febrero, pues se celebraba en Oruro la conmemoración de la Revolución de 1789 y además la entrada folklórica del Carnaval, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, se suscitó la desgracia.

A las 18:30 horas aproximadamente, una fuerte explosión tronó en la ciudad; los miles de espectadores no entendían qué había ocurrido y la mayoría siguió disfrutando de las danzas del Carnaval, pero en la esquina de la avenida del Ejército y la calle Backovic, a 100 metros de donde se realizaba la fiesta folklórica, el panorama era desolador.

Las víctimas fatales, eran todas parte de una misma familia, cuya cabeza era una mujer que vendía comida en la esquina de la desgracia, por lo que inicialmente la Policía apuntó a un posible problema con la garrafa de la comerciante, que después fue descartado. En el hecho además salieron lesionadas medio centenar de personas.

Muchos en Oruro, recién se enteraron de la desgracia en la noche o al día siguiente. Las sospechas de un atentado comenzaron a tomar fuerza.

MARTES

La gente aún comentaba lo ocurrido tres días después, mientras se celebraba el tradicional Martes de Ch´alla; muchos pasaban cerca del lugar para observar la "huella" que dejó la tragedia o para rezar por las víctimas.

Pero una vez más Oruro vivió una pesadilla esa jornada. Casi a la misma hora, aproximadamente las 18:00, a tan solo una cuadra de donde había ocurrido la primera explosión, en la Backovic y Caro, una vez más "algo" estalló. Fuego, humo y mucha gente corriendo totalmente asustada, era el panorama que se tenía en el lugar.

Incrédulos los testigos observaban cómo nuevamente una explosión segaba la vida de ciudadanos orureños, en este caso fueron tres miembros de una familia y una menor de edad; además salieron heridas 10 personas.

Tan terrible como la explosión, fue lo que siguió a la tragedia esa noche, pues el pánico se apoderó de la gente y algunos malintencionados comenzaron a hacer circular rumores por las redes sociales de otras explosiones, atentados y hasta de criminales armados que supuestamente rondaban la ciudad causando estragos. Nada de esto resultó cierto, pero mantuvo en vilo a todos los habitantes de Oruro.

Fuente: LA PATRIA