Dueño de una técnica magistral de impecable ejecución

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La música es un medio privilegiado y sentarse delante de las teclas de un piano, manejando las manos con completa independencia, movilizar toda clase de escalas, arpegios, adornos, inversiones y alteraciones armónicas, para expresar una composición de autores universales, es privilegio de pocos.

Conocemos un artista de una sensibilidad única, un intérprete tan original como profundo. Características que no evitan frecuentes cambios de estilo, de sonido, de dicción y articulación. Es posible escucharlo hoy en un concierto maravilloso y seguirlo de aquí a muchos años más puesto que la corta edad que él tiene lo hace un pianista prometedor, él es Santiago Chávez Auzza.

Nacido en La Paz, el 27 de diciembre de 2001, estudia en el Colegio Ave María, tiene a Irina Efanova como maestra de piano desde los 8 años y muchos escenarios ya marcados.

1º Lugar - Vladimir Petrov de México, 2º Lugar - Santiago Adonaí Chávez de Bolivia. 3º Lugar - Fabrizzio Vargas de México. El arte en Bolivia y los artistas deben sentirse honrados, ya que se exhibió el vertiginoso vuelo de sus manos sobre el teclado, su apasionamiento y su fervorosa entrega con la música.

"Mandé un video de preselección, en esta categoría fueron 52 participantes los que postularon y salieron preelegidos 21, asistieron 19 concursantes al concurso en vivo, hubo 3 finalistas en 4 etapas, el Concierto para piano y orquesta que interpreté fue el Concierto Nro. 2 de Shostakovich".

"Estudio normalmente cuatro horas diarias como mínimo, necesito práctica constante incluso, si me tengo que quedar horas extras me quedo, porque es mejor para mí. Cada obra, cada compositor y cada estilo es un reto diferente porque cada uno tiene su propia dificultad, técnica sonora y poder discernir cada uno es un reto. De los participantes de este concurso aprendo bastante, hay mucha aspiración de mi parte llegar cada día a ser mejor y que el público lo note me hace sentir muy feliz", señaló.

Santiago derrochó energía para mantener la alternancia entre los momentos más explosivos y los más líricos de las obras que interpretó, pero no es solo un intérprete técnicamente superdotado sino un artista sensible y virtuoso capaz de extraer matices únicos con un sonido cálido y transparente.

"El joven talento Santiago Chávez Auzza se muestra dueño de una técnica magistral lograda en el arduo ensayo y la asimilación sensitiva de aquello innombrable que cada autor transmite en sus obras. Es, a su corta edad, un intérprete extraordinario, capaz de irradiar al público que lo escucha, una atmósfera musical, con una impecable ejecución que combina de forma dosificada: fuerza con delicadeza, desde una notable concentración de rigor técnico, conexión emocional, imaginación creadora y un profundo compromiso amoroso con el piano", nos dice Irina Efanova, maestra de piano de Santiago.

"Siempre destacado, muy curioso, un pianista muy sensible para la edad que tenía esas veces cuando él era mi alumno en el conservatorio, yo comencé a escucharlo como fan, pero el Santi siempre ha sido muy disciplinado", comenta Juan Andrés Palacios (arreglista y compositor).

Santiago, de 16 años, es sin duda un referente para los jóvenes pianistas de nuestra época y un ejemplo de constancia para la élite musical boliviana. Confiar en el arte, aferrarse a sus sueños y vivir por ellos es característica de pocos.

"Yo sí quiero ser músico pianista, llegar a ser mejor y ayudarme a ser mejor persona� no tengo algo claro aún, me refiero a un objetivo grande aún, pero igual iré creciendo y no solo quedarme así, sino compartir este arte con quien pueda entenderme porque la música, los sonidos involucran mucho y cambian la vida. Siento el apoyo de mi familia, mis padres Werner y Silvia, mi profesora Irina desde mis 8 años, me siento halagado compartir y gozar con mis compañeros jóvenes y mayores. Concentración, voluntad, las ganas de hacer y disfrutar marcan la diferencia, admiro mucho a varios pianistas, pero definitivamente me quedo con pianistas rusos porque son casi perfectos, el estado y el ambiente que crean son únicos." Indicó Santiago Chávez.

"Como parte de la familia de Santiago me siento muy contento feliz y asombrado a la vez por lo que él es como músico, la alegría y emoción que siento al escucharlo es inmensurable. Vive la música y tiene el don de transmitirla, pensé que solo era idea mía, pero cada vez más compruebo que cuando toca, él conmueve y la gente y el público lo siente y lo expresa. Nunca vi una ovación parecida al que le dio el público en la final de México, fue el centro de todo el concurso, la gente en las calles, sus compañeros, los jurados etc. Pienso que es un presente que hay que saber apoyarlo, cosa que en nuestro medio no se da fácilmente. Parece que la gran mayoría de las autoridades musicales y los propios ´grandes´ músicos de academia en nuestro país prácticamente no quieren conocer a los nuevos talentos o simplemente no les interesa; por ejemplo, desde hace años ofrecimos y pedimos a muchos directores de Orquesta Sinfónica tocar con ellos algo que Santiago tiene preparado, la respuesta, todas poco claras, señalan a un futuro que nunca existió. Ojalá podamos encontrar un apoyo a su estudio. Tiene un hermano menor con similares condiciones a quienes solo nos queda apoyarles con todo cariño", son palabras expresadas por Werner Chávez, papá de Santiago.

La altura de los solistas que suelen protagonizar la vida musical de nuestra geografía tiene un buen ejemplo esta semana, 2019 y el resto de la vida es para seguir porque salir a estudiar al extranjero después de su bachillerato será otra historia de éxitos más por contar. Un futuro grandioso espera a Santiago Chávez Auzza EL ARTISTA DE LA SEMANA.

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