Para empezar el tema, hay que señalar que no toda la ciudadanÃa recibe con gusto el pago de un doble aguinaldo, pues demás está decir que por su aplicación beneficia a la gran masa laboral que depende de la burocratizada administración pública y de las empresas estatales, no todas en bonanza, pero cuyos empleados perciben el beneficio, que es costeado por todos los bolivianos que de uno u otro modo contribuyen al Tesoro Nacional.
Por esa simple circunstancia es fácil asegurar el pago del doble aguinaldo, cuando los recursos son fácilmente disponibles, porque no se trata de dinero proveniente del esfuerzo de muchos trabajadores y de las dificultosas inversiones de empresarios que buscan avanzar contra viento y marea,
Cuando se disponga de buena parte de los recursos económicos, la mayorÃa que saldrán de las arcas del Estado sin mayores problemas, aunque es dinero de todos los bolivianos, una masa laboral tendrá el beneficio de una masa de dólares que se entregará a los empleados de la Administración Pública, desde los ministerios hasta las diferentes entidades de servicios al ciudadano. Paralelamente los empresarios privados confrontarán serios problemas para nivelar sus presupuestos financieros que deben sumar una cuenta extra, que en la mayorÃa no tiene respaldo financiero real, pues las condiciones no son las más apropiadas para tener ganancias por partida doble.
De acuerdo a los analistas, el efecto del doble aguinaldo se siente en el desmedido gasto de los beneficiarios en la adquisición de bienes de todo tipo, pero como se comprueba generalmente de orden suntuario y no utilitarios en mejorar condiciones hogareñas. La definición más clara está enmarcada en el despilfarro.
Pero al producirse un comercio de temporada, el fenómeno no menos interesante es que la ciudadanÃa que recibe el doble bono, lo gasta en la adquisición de productos extranjeros, una mayorÃa de procedencia china, importados en grandes cantidades, gracias a la provisión de dólares en el mercado financiero nacional, pero que se camuflan para su venta en el gigante comercio informal que por su lado es ampliamente surtido por mercaderÃa de contrabando.
La parte negativa del asunto es que las micro y pequeñas empresas, las industrias del sector prácticamente no aprovechan nada del doble aguinaldo porque sus ventas son propiamente anuladas por la competencia de la mercaderÃa extranjera, frente a esa realidad, difÃcil hablar de doble aguinaldo, sabiendo que su circulación en otros niveles, es un atentado a la industria y el comercio legalmente establecido.
Está claro que la medida será exigida, aun a costa de los daños que se ocasionan a los empresarios bolivianos de todo nivel.
Fuente: LA PATRIA
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