Gobierno asegura que la industria de litio producirá grandes ganancias

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El Foro Iberoamericano Comercial, sobre uso potencial de fertilizantes potásicos y baterías de litio en sistemas fotovoltaicos que se efectuó el pasado mes, durante dos jornadas, bajo iniciativas de Yacimientos del Litio Bolivianos (YLB), sirvió como escenario para que el titular de dicha empresa, anuncie que "la industrialización del litio, en su tercera etapa, establece la construcción de plantas de hidróxido de litio, hidróxido de magnesio, cátodos y baterías de ion litio, que una vez en funcionamiento producirán ingresos brutos anuales de por lo menos 2.400 millones de dólares".

Para muchos observadores, la motivación del foro, más aproximada a promover las potencialidades de producción de fertilizantes potásicos, de los cuales se asegura la existencia de importantes mercados externos, a lo que se añadirá la fabricación de baterías de litio, como objetivos inmediatos en las operaciones que se desarrollan en las plantas del salar de Uyuni.

Se menciona por otra parte que con la "estabilización de las plantas pilotos de cloruro de potasio, carbonato de litio, baterías de ion litio, Bolivia ingresa de lleno a la fase de industrialización para producir sales básicas con grado de baterías", remarcándose que la producción de materiales catódicos y baterías de litio, en sociedad con la alemana ACI System, implica la tercera fase que se completará con las plantas de hidróxido de litio e hidróxido de magnesio, para tener en funcionamiento el proyecto de industrialización de los recursos evaporíticos del país, cumpliendo la alternativa de consolidar uno de los anhelos más importantes de asegurar beneficios para la economía nacional, generación de empleos, apropiada infraestructura para dinamizar el desarrollo de una región del país, cumpliendo el objetivo de industrializar nuestra valiosa reserva de litio.

Lo que se rescata del informe del gerente de YLB, es que se trabaja en el cumplimiento de un proyecto estratégico para industrializar el carbonato de litio, el cloruro de potasio y otras sales para llegar en una fase final a la fabricación de las baterías de litio, para lo que se pondrá en funcionamiento un complejo de plantas a escala industrial en las proximidades del salar de Uyuni, donde se encuentra una de las mayores reservas mundiales de litio.

Cuando se mencionan tres fases de este proceso, se recuerda que la primera comenzó en 2012 con el desarrollo de investigación del proceso tecnológico y la producción piloto de cloruro de potasio y carbonato de litio en grado batería. La segunda fase comprende la construcción también a escala industrial de la planta de cloruro de potasio, la misma que fue inaugurada en septiembre pasado y se menciona la planta de carbonato de litio cuyo inicio de operaciones está previsto para la próxima gestión del 2019 propiamente en el segundo semestre, para que recién el 2020 se pueda concretar la producción industrial de las baterías.

PROCESO LEGAL

Una aclaración pertinente en este largo proceso, corresponde a señalar que en la actualidad se trabaja en la elaboración de la minuta de constitución de la empresa mixta y su aprobación consiguiente, lo que se preveía para la quincena en curso, extremo inevitable que dará lugar al trabajo del diseño de las plantas de hidróxido de litio y magnesio respectivamente. El avance de esa fase estará en ejecución entre las gestiones del 2019 al 2020, asegurándose que paralelamente y en ese mismo periodo se trabajará en el diseño e implementación de las plantas de cátodos y baterías.

En el orden legal de la sociedad en funcionamiento, los acuerdos con la alemana ACI System establecen que el Estado boliviano tendrá el 51 por ciento de utilidades a su favor y la socia percibirá el 49 por ciento de los ingresos. Como se puede observar la parte legal ya está propiamente definida, faltando solo su aprobación, pero, en materia de operabilidad y resultados efectivos, de los que será responsable la socia alemana, hay que esperar de manera optimista hasta el segundo semestre del 2020. Se trata de dos años más, en los que la fuerte competencia que ejercen los vecinos se muestra con una ventaja en el ritmo de la industrialización que anticipan tanto Chile como Argentina, además de Australia que ya comercializa baterías de litio y mantiene acuerdos con industrias que fabrican los nuevos automóviles eléctricos.

Se trata de otra espera que sumada a los más de cinco años desde que comenzó "operativamente" el proyecto, serán por lo menos ocho si no se prolongan algunos de los pasos establecidos en el cronograma de actividades.

Fuente: Medios. Cambio, PM.