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Sábado 27 de octubre de 2018

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Revista Tu Espacio

BELLEZA

Cómo quitarte correctamente la pintura de Halloween

27 oct 2018

Por: Ing. Fulvia Flores Montaño - exclusivo para Tu espacio

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El maquillaje de Halloween se pone más de moda con el pasar del tiempo, año tras año es mayor la cantidad de personas que buscan lucir un maquillaje impactante de Halloween y es fundamental para combinarlo con el disfraz que llevemos durante la noche del 31 de octubre.

Cuando elegimos qué maquillaje ponernos en la cara debemos tener en cuenta su material para que no dañe nuestra piel. Además, tendremos que conocer qué pasos seguir a la hora de desmaquillarnos. Pero lo que tienes que tener especial cuidado es el maquillaje que elijes y cómo te desmaquillas para que al día siguiente tu cara no quede hecha un horror.

Lo primero es elegir pinturas adecuadas para pintar la cara, mejor no te apliques cualquier pintura por toda la cara antes de probar que no te da reacción, por ejemplo, pruébala unos días antes en una pequeña zona de la piel. Si puedes utilizar un maquillaje profesional, mucho mejor. Además, antes de pintarte la cara, debes protegerla con una buena crema hidratante. Busca las que sean bastante densas, para que creen una buena capa protectora en tu piel.

Cuando llegues a casa, tienes que desmaquillarte bien la cara por muy cansado o cansada que estés. Si dejas los poros obstruidos durante mucho tiempo, al día siguiente el maquillaje te puede dar reacción y salirte granitos inoportunos. Si se trata de un producto especial de maquillaje, puede que tenga unas instrucciones de cómo hay que limpiar la cara tras su uso, léelas con atención y usa los productos que el maquillaje requiera. Los maquillajes con base de agua son mucho más fáciles de eliminar que los que tienen base grasa.

Probablemente tendrás que repetir varias veces la operación de quitar el maquillaje para acabar con las manchas persistentes, e incluso utilizar distintos métodos: agua y jabón especial para la piel del rostro, desmaquilladores y toallitas húmedas. Otra buena manera de limpiar y al mismo tiempo hidratar y cuidar tu rostro es aplicándote aceite de coco o aceite de jojoba en la piel, o incluso, algo de vaselina.

Desmaquíllate con cuidado, evita frotar mucho, aplica el desmaquillante y deja actuar unos segundos para luego retirarlo con un algodón y lávate con agua tibia para quitar cualquier resto de maquillaje. Después de limpiar tu rostro, extiende una crema de noche reparadora para que al día siguiente tu piel se despierte como nueva.

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