Miercoles 24 de octubre de 2018
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Editorial y opiniones
Grave drama: sufrir pésima administración de justicia
24 oct 2018
Armando Mariaca V.
Justicia, "una de las cuatro virtudes cardinales que inclina a dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece. Derecho, razón, equidad. Conjunto de todas las virtudes. Lo que debe hacerse según derecho y razón". Son conceptos claros, definitivos y terminantes sobre los derechos que cada ser humano tiene como consideración y amor, respeto y honra. Son muchas las expresiones, frases y conceptos que permiten ver que la Justicia es la extensión de la omnipotencia y gracia de Dios hacia los hombres; pero, lamentablemente, muchos componentes humanos en todas las generaciones, no han tomado conciencia de lo que es o debe ser la justicia y menos de su debida, honesta y responsable administración. Menos, por supuesto, se ha creído en que la justicia que se dispensa a los demás es el mayor efecto de caridad.
La justicia en nuestro país desmerece el apego y respeto de la colectividad y no porque ella sea mala o esté deteriorada o sea contraria al derecho de los hombres, sino porque quienes la administran, la conducen y creen que deben manejarla a su arbitrio, por dañino y censurable que sea, la aplican mal, la prostituyen, la degeneran y la hacen enemiga o contraria, ajena al derecho, urgencia y necesidades de quien precisa de ella. Son, pues, jueces, fiscales como los administradores los que deben cuidar que la Justicia sea derecho aplicable a todos sin distinción ni discriminación alguna.
