Los buenos ejemplos hay que imitarlos

El 13 de mayo de este año, llegó el plogging a Bolivia, cuando cientos de personas se pusieron a correr levantando basura de las calles de Oruro, partiendo de los cuatro puntos cardinales y llegando a la plaza principal, 10 de Febrero, la misma actividad se replicó en la zona sur de la urbe el 26 de agosto reciente.

Dicha actividad que en Bolivia llegó a través de los orureños comienza a replicarse en otros departamentos, mediante otros actores que imitaron la idea que en realidad nació en Suecia, cuando a los deportistas se les ocurrió salir con su bolsa de basura y en el trayecto de su carrera de entrenamiento iban recogiendo desperdicios.

Además de beneficiar a la propia salud, pues en una carrera de 30 minutos se queman hasta 300 calorías, también se ayuda al medio ambiente con este ejercicio.

No importa tanto quién lo inició, lo que vale es que ese buen ejemplo se está imitando en diferentes partes del mundo.

Por muchos años el plástico se convirtió en el material por excelencia, ya que no se rompe fácilmente, no se oxida, más liviano, era más fácil de producir y usar en todo tipo de industrias, inclusive en la automovilística, pero también con el paso del tiempo los científicos se dieron cuenta que además de no ser un material biodegradable, es peligroso para la salud porque cuando se calienta despide gases tóxicos, y libera sustancias que hacen que las personas engorden con más facilidad y en algunos casos consumir partículas de plástico provoca cáncer.

Dicho esto, vemos que es menester seguir el ejemplo de Chile y limitar o eliminar el uso del plástico, que además en Oruro tapona las bocatormentas y da un aspecto desagradable y sucio al medio ambiente.

Todos estos ejemplos, de personas que trabajan por eliminar la contaminación, cuidar nuestro hábitat y mejorar la salud de nuestro planeta son acciones dignas de imitar, hagámoslo, no esperemos lo peor para ponernos manos a la obra.

Fuente: LA PATRIA