Domingo 26 de agosto de 2018
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Editorial y opiniones
EDITORIAL
Desacuerdos cotidianos
26 ago 2018
Pese a las condiciones vigentes, en las que se exalta el respeto a la democracia, hay deslices que muestran lo contrario, no otra cosa significan algunas vedadas amenazas que alteren las libertades de pensar, de expresión y de prensa, que son atributos reconocidos en la Constitución que deben ser cuidadosamente preservados por constituir patrimonio irrenunciable de dignidad y libertad.
Se trata de un proceso que siendo parte de los hechos cotidianos ocasiona algunas pugnas que sacuden la estructura de organizaciones de todo orden, especialmente las polÃticas, movimientos sociales, entidades públicas y hasta en los clanes familiares, dependiendo de intensidad en los diferentes sectores, en función al grado de relevancia que disponen los protagonistas de cada sacudón.
Somos parte de un proceso democrático, vigente en los niveles generales, aunque ciertos hechos, producidos de vez en cuando, ponen en duda el respeto a esa condición inalterable de nuestra Carta Magna.
Es evidente que no faltan controversias al interior de organizaciones oficiales, con mayor frecuencia en las de base, esas que apoyan por ciertas circunstancias a los que dominan el esquema gobernante, pero que por algunos malos entendidos disienten en opiniones y hasta en el cumplimiento de algunas resoluciones, es que pese a todo, la democracia está por encima de algunos intereses malsanos.
Este tipo de pugnas sirven en muchos casos para develar inquietudes en segmentos comunitarios, donde no siempre se satisfacen demandas o se cumplen "órdenes superiores", las disidencias y hasta las contradicciones, si son consideradas en la instancia que corresponde, pueden ser factores favorables, por ejemplo para la apertura de diálogo, la posibilidad de discutir problemas, por asà decirlo, pero buscando soluciones por la vÃa del entendimiento.
