Cómo evitar el chantaje emocional en la pareja

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Una de las prácticas más usadas en una relación es el chantaje emocional, una estrategia de control que se lleva a cabo para conseguir que otra persona acabe accediendo a tus propuestas o realizando aquello que le pides, mediante técnicas que acaban provocándole remordimientos o aumentando sentimiento de culpa.

El chantaje emocional se trata de una manipulación que encubre la necesidad de sentirse amado, por parte del chantajista; esta inseguridad en él mismo provoca que constantemente necesite salirse con la suya y hacer ver que sus opiniones son importantes y valoradas por los demás.

Empieza cuando la otra persona condiciona las actitudes de su pareja, es decir, hace que nazcan remordimientos por sus comportamientos o actitudes y aumenta su sentimiento de culpabilidad. En definitiva: el chantaje emocional consiste en obligar a querer, sentir, hacer o decir a la otra persona aquello que uno quiere.

Entre los tipos de chantaje emocional más comunes entre las parejas destacan:

Silencio: es una manera habitual de mostrar su enfado. Si tú, como persona manipulada, eres débil y vulnerable, se arrastrará

Culpa: estrategia de hacer sentir culpable a la otra persona, para conseguir que cambie de actitud o comportamiento.

Promesas: ofrecen promesas para conseguir un fin que casi nunca se cumplen.

Dar y recibir: siempre ofrecen algo a cambio para poder mantener atada a la otra persona.

Se utiliza en la pareja como una herramienta de control y poder sobre la otra persona. Lo principal para evitarlo es no ceder nunca a dicho chantaje, ya que si no te acabarás convirtiendo en un esclavo del manipulador. Métete en la cabeza que el chantaje emocional forma parte de una relación tóxica, por lo que no te traerá nada positivo. Este tipo de relaciones desgastan y agotan la energía.

Evitar el chantaje emocional es fácil si te rodeas de personas positivas que te tratan como te mereces, que confían en ti, que te apoyan. Debes dejar de ser una víctima para convertirte en aquella persona que deseas ser, sin que nadie se tenga que interponer en ese camino. Tú vida es solo tuya. ¡Vívela sin ataduras!

Tampoco es bueno pensar que todas las peticiones son exigencias o forman parte de un chantaje emocional, dado que nos estaríamos equivocando.

Piensa en ti y rompe el círculo vicioso en el que te has adentrado. Es fundamental abrir los ojos. A menudo, nos negamos a escuchar aquello que no nos gusta, pero si quieres romper la conducta de manipulación de tu pareja, debes ser consciente de que se está produciendo. Háblalo con él, utiliza la comunicación para que él también pueda salir de este tipo de conducta.

Recuerda que el respeto y la empatía configuran una parte fundamental y básica en cualquier relación. Hay que aprender a escucharse, explicarse y entenderse. Decir lo que se siente y lo que se necesita es positivo, pero no dejes que otra persona te cohíba o te coaccione.

Fuente: Uncomo.com