En estos últimos años se realizaron diferentes eventos sindicales a nivel nacional, de los trabajadores obreros, indÃgena originario campesinos, sin efectuar congresos sectoriales, regionales, ya no se respeta la democracia sindical, ya no existen discusiones, debates, seminarios, asambleas, que permitan esclarecer los intereses, necesidades, derechos y obligaciones, análisis polÃtico, social y económico, que oriente a los trabajadores de base y al pueblo boliviano.
La cúpula de dirigentes, ya no expresan en forma democrática, los problemas, las reivindicaciones socioeconómicas, salariales, toman decisiones unilaterales, con un sectarismo secante en la actividad sindical, sin la participación de los trabajadores de base, se manifiesta represión indirecta hacia los afiliados que opinan lo contrario de los dirigentes laborales, ya no plantean objetivos concretos a las autoridades gubernamentales.
Diariamente se observa en las calles, mendicidad, gente desocupada, en busca de un trabajo, no hay organización sindical que represente a esa gente, el hambre y la miseria, obligan a ingresar a la informalidad y el contrabando para sobrevivir y atender las necesidades básicas de sus familias, la representación sindical ignora esta realidad social, profesionales capacitados, están en el mundo de los desocupados.
En las organizaciones sindicales están dirigiendo grupos de poder, sin respetar la democracia de los trabajadores de base, hablando a nombre de ellos, sin haber consultado, debatido, sobre temas actuales, derechos laborales, sobre la situación polÃtica del paÃs. Y las autoridades gubernamentales, queriendo tener bajo su control a las direcciones sindicales, con actitud clientelista, peleando por cargos jerárquicos, por trabajo en la administración pública. A pesar de estas debilidades, el movimiento minero, sigue siendo la excepción que todavÃa orienta a los trabajadores del campo y de las ciudades.
Los representantes del magisterio nacional no se han podido reunir en un congreso sindical convocado por su organismo máximo, debido a la presencia oficialista y la falta de respeto a sus estatutos, las camarillas han generado desorganización sindical, no han podido instalar este evento de magnitud, falta una democracia sindical, para tratar temas de la coyuntura actual, temas de carácter polÃtico, sindical, educativo, social y económico, para recoger las propuestas, opiniones de las diferentes federaciones departamentales, regionales del paÃs. Interesa al movimiento sindical de los trabajadores bolivianos, que el magisterio debe seguir como referente de orientación de lucha de los trabajadores obreros, campesinos, indÃgena originarios, de la clase explotada, manteniendo la independencia polÃtico sindical.
Las polÃticas liberales aplicadas por los gobiernos, han convencido a los trabajadores para que sean apáticos, conformistas, indiferentes, a los problemas sociales, insensibles ante la mendicidad de la gente pobre, dejar de organizarse en sindicatos, si se rebelan, reciben amenazas de la parte patronal, de las autoridades polÃticas, administrativas, que ya no permiten la libertad de pensamiento. Se ha impregnado en la mentalidad de los dirigentes, se observa actitudes individualistas, sectarias, cerrado en sus concepciones polÃtico ideológicas, sus acciones es defender a la clase dominante. Y las bases han caÃdo a una pasividad extrema que no les interesa reunirse en asambleas, para discutir sus problemas laborales, aceptan cualquier decisión que tomen sus dirigentes.
¡Oferta!
Solicita tu membresÃa Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del dÃa en PDF descargable.
- FotografÃas en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.