Tenencia responsable de animales domésticos

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Todas las personas tienen el derecho de poseer un animal de compañía y beneficiarse con los efectos mascota positivos que produce esta compañía, pero este derecho está fuertemente ligado a la responsabilidad de esa relación.

Adquirir un animal como mascota significa en primera instancia asumir el compromiso de disponer de bastante tiempo para brindarle y algo de dinero para cubrir sus gastos de mantenimiento. Además, los animales necesitan cariño y ser respetados como seres vivos.

Algunas personas se confunden y creen que sus mascotas (sobre todo si son perros de raza grande), son como niños que crecen, maduran y se vuelven responsables de sus actos en su estado adulto. Obviamente esto no es así, y se debe tener conciencia que, dependen en todos los aspectos y durante toda su vida de su propietario.

La Tenencia Responsable es la suma de deberes y obligaciones del propietario, orientados hacia dos grandes áreas de la relación con su mascota: El bienestar animal y la responsabilidad de los actos del animal.

El propietario debe tratar de proveer un medio ambiente adecuado, esto significa un lugar para vivir acorde a sus necesidades, a su tamaño y actividad física, además del espacio vital se debe tener en cuenta los lugares donde desarrollará sus necesidades básicas como comer, beber, dormir y hacer sus evacuaciones. También hay que tener en cuenta que no se debe tener animales atados permanentemente, ni enjaulados o en habitaciones donde las inclemencias climáticas pueden afectar la salud psicofísica.

Proveer una alimentación adecuada a la especie, raza, edad y estado de salud, darle la atención de la salud necesaria tanto en el aspecto preventivo como curativo en las distintas etapas de la vida. Hay que tener en cuenta que la vacuna antirrábica es de aplicación obligatoria anual y por toda la vida.

Fuente: Rubén M. Gatti (medicinafelinabsas.com.ar)