Proyectos para desarrollo sostenible

Varios son los proyectos que se incluyen en un listado que anualmente incorpora alguno nuevo para mejorar las condiciones del desarrollo sostenible del departamento. Estos proyectos que son parte de los "tradicionales pliegos petitorios de la "orureñidad", se promocionan con inusitado entusiasmo en proximidades de dos fechas que tienen que ver con la historia de la orureñidad, el caso del 10 de Febrero y luego cada 1ro de Noviembre, la Revolución y la Fundación, el resto del año, son casi imperceptibles las demandas distritales, salvando algunas contingencias emergentes de necesidades "temporalmente urgentes".

La falta de cohesión de nuestra principal entidad cívica, con dirección bicéfala, diluye el apoyo institucional y hace que los reclamos se tornen aislados y de poca relevancia, al punto que no hay autoridad nacional que ponga remedio a las necesidades de Oruro, en el sentido de movilizar la fuerza local para lograr objetivos concretos.

Ya es tiempo que en Oruro se definan estrategias concretas para encarar el desarrollo del distrito, empezando por consolidar la entrega de tierras fiscales para establecer un área de reserva que permita emplazar el anhelado parque industrial que ha sido postergado por malas políticas que se arrastran desde la antigua prefectura y que deben enmendarse por la Gobernación actual, además de concretar las zonas de reserva industrial entre Vinto y Huajara, donde actualmente están asentadas varias empresas industriales que generan fuentes de empleo y diversifican la economía de la región.

Es normal el reclamo ciudadano, ante emprendimientos menores que son parte del maquillaje citadino, pero no se integran al proceso de desarrollo que necesita proyectos mayores con programas de incentivo para atraer industrias y consolidar el ecoparque industrial, un primer parque tecnológico del país, el funcionamiento de una Terminal Multimodal de Carga Vial, Aérea y Férrea para dar forma a una zona logística de embarque marítimo que mueva un gran comercio interoceánico, teniendo bases concretas como el corredor bioceánico hacia Pisiga, el funcionamiento del Puerto Seco, la integración de Oruro al Corredor Ferroviario Internacional que unirá puertos en los dos océanos, Pacífico y Atlántico. Hay ideas que han sido planteadas directamente al Presidente orureño de Bolivia, esperando que pueda generar condiciones propicias para alentar un plan superior de arranque productivo, pero con favorables condiciones para que se haga inversiones útiles y se evite gastos insulsos como vías callejeras de doble piso, u otras que sólo distraen fines de semana a una parte de la población.

La ciudadanía ya está cansada de la posición "pedigüeña" de los comités cívicos y de algunas autoridades conformistas que trabajan con sentido "enanista", cuando lo que Oruro requiere es decisión de su institucionalidad, de todos sus sectores para plantear la atención que nos corresponde y que no puede postergarse por más tiempo. Oruro tiene que entrar en el plan de las obras gigantes, esas son las que asegurarán el desarrollo sostenible departamental, al margen de los entredichos de la politiquería barata, el conformismo y la apatía que son la causa de nuestro atraso.

Fuente: LA PATRIA