Maestro en lucha permanente

Los trabajadores en educación se encuentran en un conflicto de organización sindical por la intervención al congreso de algunos grupos externos, participación sectaria de algunos dirigentes sindicales, sin respetar sus estatutos orgánicos. Se hace necesario, continuar con este congreso sindical, donde debe realizarse una debate político, sindical, educativo, social y económico, los maestros de base confían y esperan de sus representantes sindicales de cada región, propuestas posibles de conseguir en sus aspiraciones económicas salariales, profesionales, pedagógicas, para elevar el nivel de lucha permanente, con una orientación objetiva, a los trabajadores y del pueblo en general.

Está en los maestros formar nuevos líderes sociales, políticos, profesionales, que tanta falta hace en nuestro país, a falta de nuevos líderes estamos cayendo en el caudillismo, fomentando la egolatría, posterior inclinación al autoritarismo. El maestro es activo, trabajador, está en lucha permanente por mejorar su situación profesional, por sus derechos económicos, salariales, siempre solidario con los problemas de los trabajadores del país.

Hay maestros de aula que tienen mucha experiencia pedagógica, en el aprendizaje de los estudiantes que no es reconocida por las autoridades superiores, no son escuchadas sus propuestas educativas. Contamos con buenos directores administrativos con bastante experiencia educativa, que motiva, dinamiza la comunicación con los estudiantes, profesores y padres de familia, mantiene buenas relaciones humanas, estimula actitudes de solidaridad, compañerismo, sensibilidad social, incentiva la formación permanente de sus compañeros de trabajo, fomentando el trabajo en equipo, un trabajo colectivo, sin esperar compensaciones económicas, porque tienen vocación de servicio a la comunidad, fomenta confianza, buen humor, alegría, optimismo, entusiasmo, en los maestros y estudiantes, que sepan respetar a las personas mayores, ambiente familiar, para tener buenos logros educativos. Saben escuchar las opiniones de los alumnos, profesores, padres de familia, respetando la diversidad social y cultural del entorno educativo.

Los maestros merecen toda consideración de la sociedad, respeto, los transportistas deben darle el primer asiento, el lugar que corresponde, en países vecinos, se les tiene el mayor respeto, reciben el mejor trato, porque necesitan desarrollarse y nuestros maestros no son gente conservadora, están en permanente investigación, buscando nuevas formas y metodologías de trabajo, para que los estudiantes tengan buenos resultados en su formación, los maestros son dinámicos, activos, están en permanente actualización, para transformar la educación actual, si queremos ser un país desarrollado, primero está la educación.

Tenemos maestros que trabajan en diferentes niveles, dedicados a la formación de sus estudiantes, con bastante dedicación, humildad, cariño, afecto y sacrificio, esta clase de profesores son reconocidos por sus alumnos, por la sociedad, que trabajan calladamente, con mucha paciencia, desarrollando valores positivos en los niños, niñas, incentivando la investigación científica y tecnológica.

El maestro es un luchador social, por excelencia, porque defiende los derechos de los niños, niñas, juventud estudiosa, trata de solucionar los problemas que aquejan a los estudiantes, gracias a ellos tenemos buenos artistas, profesionales, comunicadores, periodistas, abogados, ingenieros, médicos, maestros, técnicos, buenas autoridades, líderes sindicales, líderes políticos, en ellos está la formación de nuevas familias, la convivencia fraterna, en ellos está disminuir la violencia social, desarrollando valores morales, honestidad, sinceridad en los estudiantes y que el Estado está en la obligación de escuchar las demandas económico sociales y respetar sus derechos profesionales.