Por: Marlene Durán Zuleta - Poeta Escritora, compositora e investigadora de la cultura orureña
¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...
"Pintó una nube viajera,/ y dijo: Esto es un querer/ pintó un ave pasajera,/ y dijo: Esto es el placer./ Y luego, en un arrebato/ de sentimiento, el pintor/ diseñó un bello retrato/ de Magdalena: el dolor./ Quiso pintar el amor: Pero no supo que hacer!/, ¿cómo habría de concebir,/ un sollozo, un suspiro,/ unas ganas de llorar/ y unas ganas de reír?.../ Y tras de mucho pensar,/ cómo pintar el amor,/ pintó una lágrima ardiente,/ y unos ojos de mujer!".
Esos versos fueron escritos por nuestro poeta Luis Mendizábal Santa Cruz, titulado "El Pintor", de su primer libro "Surcos de Sol".
Nació un domingo 28 de abril de 1907, fue bautizado de seis meses, un día 4 de noviembre del mismo año, siendo sus padres el Doctor Apolinar Mendizábal S. y Doña Emilia Santa Cruz, aparecen como sus padrinos Don Emilio Fernández Molina y Doña Roxana Fernández.
Luis Emilio Mendizábal Santa Cruz fue primogénito, la familia se completaría con Gastón, Emilio, Tita, Marina y Elsa. Don Apolinar llegó a ser Diputado por Oruro, político liberal, elegido desde el año 1912. Su hermano Emilio también fue diputado por Sucre.
Luís Mendizábal, estudió en el Colegio Bolívar de Oruro culminó sus estudios en 1925, compartió con su hermano Gastón, el mismo establecimiento educativo. La familia Mendizábal Santa Cruz, otrora tenía como domicilio la calle Gobierno No. 1616, hoy calle Presidente Montes, actualmente se encuentra el Banco de Crédito.
Enviado a Chile a estudiar medicina, recibió la semilla del influjo sublime. Fernando Loayza Beltrán escribió: "Poetas de acá y de afuera del país, donde vivió un tiempo, juzgaron con calor y entusiasmo las nuevas producciones de Mendizábal". Su poemario "Surcos de sol" fue editado por Editorial "La Patria", son versos escritos desde 1928 a 1930. Confiesa: "Me obstina la nostalgia empedernida/ de una tierra de cálidos ideales/ donde viví un pedazo de mi vida/ olvidando la angustia de mis males/ nostalgia de una tierra que no es mía/ donde sentí el amor, quizá el primero/ un infinito amor, quizá el postrero". Es notorio que Luis quedó enamorado de Chile.
Al retornar a Oruro, el Dr. Apolinar Mendizábal se dedicó a su profesión, trabajó en la Empresa de Ferrocarriles de Oruro. Dejó de existir en la ciudad de La Paz, el 24 de diciembre de 1928.
El deceso de su padre irrumpe sus estudios, viéndose obligado a sitiarse a la cabeza de la familia. Su primer trabajo fue en la redacción del diario La Patria en 1928, cuyo director era don Demetrio Canelas, teniendo como compañeros a Rodolfo Salamanca, Rafael Ulises Peláez, Porfirio Díaz Machicao, Eduardo Ocampo Moscoso.
Posteriormente fue Director de la página de Arte y Literatura de la misma fuente periodística el año 1930.
Estalla la Guerra del Chaco y Luis Mendizábal en diciembre de 1932, se incorpora al Ejército a uno de destacamentos de infantería, organizado en la ciudad de Santa Cruz. Ya en el frente el 10 de enero de 1934 por orden del Estado Mayor fue ascendido al grado de suboficial, por su excelente comportamiento.
Finalmente es evacuado por su delicado estado de salud, pasó por Villa Montes llegando a Oruro, siendo recibido por sus colegas del diario La Patria. Durante la campaña en Platanillos de 1933, escribe: "Las pobres manos mías no son ya pensativas/ y cuando las extiendo con ansiedad creadora,/ encuentro solamente harapos de la sombra,/ y el alma de la nada/ tendiéndome otras manos,/ iguales a mis manos".
El poeta, soldado a mediados de 1935 cumple las funciones como redactor del diario "Noticias" en Oruro. Casi a finales del mismo año es trasladado a Sucre y dicta la cátedra de Literatura en la Escuela Nacional de Maestros.
El 18 de febrero de 1936 contrae nupcias con la señorita Amalia Vargas Calvimontes, de cuya unión nacieron Gastón y Gabriela.
Entre abril de 1936 y febrero de 1937 publicó en el diario Noticias la columna "Con lápiz de humo" crónicas y hechos del ambiente orureño, nacional e internacional. Con data 1937, sale a luz su segundo poemario "Llamarada", se vislumbra esperanza y amor: "Cien ciudades distintas/ me ofrecieron su luz y su paisaje/ pero la sombra,/ acechaba al final de los senderos./ Nunca he sido feliz como soy ahora/ en esta tierra mía,/ donde nació mi sangre".
Al recordar la creación de Oruro en 1937, Luis Mendizábal Santa Cruz presenta el canto lírico "La Fundación de Oruro", en 114 versos resume la historia de la ciudad, desde el proceso colonial, llega a la etapa libertaria y las leyendas: "Ahora escribo con sangre de mi sangre/ que es la sangre de todas las tormentas/ es mi poema vital/ bandera del espíritu,/ trompo azul de la raza/ aro del sol/ paisaje/ visto mágicamente,/ desde el faro de luz del corazón/ para evocar por siempre/ la Fundación de Oruro"
Como columnista retorna al Diario La Patria, posteriormente es nombrado Director interino.
En 1940 se establece en la ciudad de La Paz, trabaja en los periódicos "La Noche" y "El Diario", continúa manteniendo su columna "Con lápiz de humo". Llegó a utilizar cuatro pseudónimos: Olivier, Abril, Juan del Palmar y Mendi.
En su hogar ya se entrelazaban los hilos artísticos de la música, tocaba piano, sabía pulsar la guitarra y otros instrumentos musicales, precisamente Guillermo Vizcarra Fabre en 1941 decía: "Poesía fina como un aguzado dardo de agua es la de este poeta. Su inquietud lo eleva a la embriaguez constante de la belleza. Devoto fervoroso de los ritos cabalísticos de la estética, conoce el dolor de Laocoonte y el significado de la sonrisa de la Gioconda, tanto como una gaviota de Lulli o una partitura de Ravel; precisamente tiene un bello poema interpretativo de la Catedral Sumergida de Debussy".
El 21 de agosto de 1946, escribe el último poema. Dedica un soneto titulado Retrato de Edy, para el hermano Eduardo Vásquez Encinas-In the last time: "Las manos dulces con sabor de parra/ brotando en los racimos de la vida./ La sombra musical de la guitarra./ Muy parecido al sueño de partida/ que al terminar invierno, la cigarra,/ empaña al sol la despedida,/ puesto que al tiempo nada nos amarra./ En ti veo la imagen del hermano/ que se fue una mañana, mano a mano/ con el silencio gris del corazón./ Y en el hondo cansancio de la ausencia/ Sabe mi alma que vibra en tu existencia/ la inmensidad del sol y la ilusión".
Problemas familiares y económicos dieron paso a una anarquía en la vida de este notable poeta y escritor. A la edad de 38 años, se elimina voluntariamente el domingo 25 de agosto de 1946 a las 11:30 de la mañana en la ciudad de La Paz, certifica la defunción el Dr. Gambarte. Dejó una carta póstuma, en la que se despide de este mundo, por qué frente a la Muerte: "La Paz, agosto de 1946. Mis amados hermanos Sammy y Nena: En la hora de las tinieblas ni se desfigura la verdad tremenda de esa risueña e inútil aventura que es la vida. Voy a reunirme con mi padre, mi hermano y otros seres muy amados y con la hermana de Uds. Carmiña. A pesar de mis defectos y mis calamidades he sido amado en la vida; tuve mucha suerte y una horrible necesidad de morir. Al borde de todos los abismos, Dios supo protegerme y salvarme. Ahora no quiero nada. Me han comparado con muchos escritores y nunca han podido compararme conmigo mismo. A mis hermanos Sammy y Nena les encargo decir que amo profundamente a mi madre, hermanos y hermanas. A mis hijos, mis amigos y todo el mundo al que amo y a los que nunca me entendieron. Adiós y que Jesús les bendiga.
Nadie más debe sufrir por culpa mía. Todos deben estar dichosos de esto que es mi despedida, y la palabra que viene desde hacen muchos años: Adiós. Mendi Santa Cruz".
Fue motivo de homenaje de despedida de artistas y periodistas, Yolanda Bedregal, Antonio Ávila Jiménez (esposo de Hilda Mundy), Julio Ameller Ramallo, Julio de La Vega.
Porfirio Díaz Machicao, compañero de trabajo en sus primeros años en La Patria señala: "Lo conocí en Oruro, allá por los años de 1928, cuando comenzaba yo a luchar solo con la vida, sin más recurso que la poca habilidad de zurcir crónicas. Entonces se sumó a nuestra bohemia este desesperado. Criatura deshecha por la adversidad de un camino de ritmos quebrados y pensamientos en plena desolación. Su voz se unió al coro de los que amaban la literatura, no con la fría aprehensión del cerebro, sino con la braza del corazón, dispuesto siempre a terminar en carbón o ceniza.
Asistió a la Guerra del Chaco, como el mejor de los atletas. Vivió un mundo desesperado y sombrío que él quiso matizar con la ironía de sus crónicas periodísticas".
El escritor Augusto Guzmán lo define como "claro y brillante. Espontáneo y refinado al mismo tiempo, dominó sobre todo las combinaciones métricas modernas, dando cauce a una inspiración lozana, velada de escepticismo, fue también sonetista diestro, de frase limpia y acento cristalino. Sus imágenes sin frascas, espirituales, atrayentes. Tiene la facultad de transmitir sus inquietudes en formas puras y precisas, sin fugas metafísicas ni obscuridades del lenguaje. Como poeta descriptivo, ha producido piezas de singular mérito. Sus cantos de Oruro y Santa Cruz de la Sierra son notables. Entre otros muchos de arte menor en que el poeta manifiesta elevación y delicadeza de sentimientos, descendiendo alguna vez, con tenebroso sentimentalismo, a los antros de la desesperación, en los días grises que precedieron a la violencia de su muerte. Sus mejores poemas, con excepción de unos pocos, son posteriores a sus dos libros. Partió en la madurez de su vena poética.
Es peculiaridad suya el haber mantenido categórica diferencia de estilo entre su prosa y su poesía. Aquella fue ligera y retozona, aun a través de nostalgias que llenaban sus evocaciones. Sus poemas, en cambio, son versiones auténticas de un sentir profundo, íntimamente ajeno a toda insinuación humorística que apenas sí puede encontrarse en sus estrofas galantes como rápida pincelada de pura gracia".
Yolanda Bedregal comentó: "La lozana, espontánea y vibrante poesía de sus primeros libros ´Surcos de Sol´, y ´Llamarada´, de fáciles y tiernas imágenes, se fue ensombreciendo en vísperas de su voluntaria partida, pero conservó siempre una forma artística y una plena sinceridad de sentimiento. Paisaje, ternura, amor, insatisfacción son las constantes de la producción de este entrañable espíritu aristocrático, bohemio y auténtico poeta".
El cruceño Enrique Finot sostuvo: "Luis Mendizábal Santa Cruz tiene: ´deleite, fuerte realismo animan sus versos del valle, la altipampa y la montaña´". Fue premiado en los Juegos Florales de Sucre el año 1939.
Cuando se produce su muerte, otro excompañero, Enrique Sánchez Narváez se despide de su amigo poeta: "Anclado en Oruro, un puerto al que no hubiese deseado aun volver - aunque muy amado, pero exiguo para su ansiedad de horizontes nuevos - anhelando liberarse de sus frustraciones, buscó los causes de la música. Fue un místico de la noche con Chopin, cuyas fiebres sentía en su sangre y en su carne cuando el poeta, para calmarlas, ponía jirones de su alma en el teclado; era romántico y tierno con Brahms, cuyos bellos lieder iluminaron de placer, lírico y brioso con Tchaikovski; ardiente y fluvial con Debussy, a quien amaba y admiraba, la pasión de Mario Estensoro por el gran impresionista francés".
La agrupación "Gesta Bárbara" de La Paz, hizo un homenaje en 1947 en ocasión del primer año de su desaparición física. Gustavo Medinaceli, Alcira Cardona, Jacobo Libermann, Yolanda Bedregal, Julio de la Vega, rindieron una postrer veneración al poeta orureño. Todos estos materiales fueron recogidos y publicados en forma de folleto con el título de "Gesta Bárbara: Homenaje de Tinieblas al poeta Luís Mendizábal Santa Cruz.
Ramiro Condarco Morales, dice: "In Memoriam - A Don Luis Mendizábal Santa Cruz: Tú que fuiste incansable peregrino,/ que enseñaste, en el yermo, con la fuente;/ Tú, el trovador de la canción ardiente/ que se entona entre el polvo del camino./ Tú que fuiste un ocaso purpurino/ entre un rumor de viento y de torrente;/ que por laurel llevaste en tu alta frente/ el aguzado dardo del espino;/ Tú que arrullaste el páramo desierto/ de la nostalgia con el raudo canto;/ Tú cantor de ansiedad; estás ya muerto. / El trovero te brinda su homenaje,/ yo, tan sólo, el rocío de mi llanto;/ que las sombras cubrieron tu celaje".
Con data 21 de enero de 1946, transcribo unos fragmentos del poema inédito de puño y letra Romance de la flor de Cerezo, Para mi hermanita Luchy.
Para tus ojos de almendra/ color de tarde tranquila/ Para el sabor de leyenda/ de tu ágil silueta gira/ junto al jazmín de tus manos,/ perfumadas de ternura y abierta en lirios blancos, deshojados de la luna./ Quiero el rosal./?Samurai con dinastía/ de flor de loto y cereza/ busco el bansái del olvido/ y en tu presencia el velero./ En el sampán de tu vida,/ florida de crisantemos/ embarco las golondrinas/ de recuerdos hogareños./ Y el mandarín del Destino/ manda el dragón del Yashaba/ para que sea florido/ el hara-kiri de mi alma".
Cuando se cumplieron 50 años de su nacimiento en 1957, la Universidad Técnica de Oruro, a través del Director del Departamento de Extensión Cultural Lic. Hugo Revilla Valenzuela, propuso a la Alcaldía, realizar trámites para que los restos mortales del poeta orureño sean trasladados a Oruro, su tierra natal. Ese eco sonó como campana y la Alcaldía gestionó ante su similar de la ciudad de La Paz para que esta solicitud culmine y fue el alcalde Eduardo Dehne F., junto a Alfredo Anaya P. Oficial Mayor y Jorge Guzmán E. Secretario General que el 30 de enero de 1957, que emitieron la Ordenanza Municipal que en cuatro artículos resaltaban la personalidad del poeta Luis Mendizábal Santa Cruz. La Alcaldía corrió con los gastos de traslado.
El Rector de la Universidad Técnica de Oruro, Arq. Edmundo Mirones Bustos, fue encomendado en iniciar la despedida durante el traslado al Panteón de los Notables.
En su memoria se fundó el Colegio Luis Mendizábal Santa Cruz el 20 de julio de 1957, cuyo primer director fue Otto Saucedo Rivera, eventualmente funcionó en ciclo básico de la escuela Jorge Oblitas, también se nominó como Luis Mendizábal Santa Cruz, al Teatro al Aire Libre.
Poeta traumado por la Guerra del Chaco, sensible a los dolores del alma, caminó largo en la noche de sus sueños, la muerte con la lírica y su canto fúnebre, silentemente se aproximaron hasta la taberna y prosiguieron revelando un rosario de sentires.
Sólo él veía al Búho de Alas Rojas, los crueles acertijos de descargar su hálito de un solo golpe cobraban fuerza. Se consumía en la depresión, ya no contaba los bellos rostros de sus hijos, menos imaginar a sus descendientes.
Sometido a la mala fortuna de su sino, y sin más voluntad que dejar este mundo, abrió la brecha de la eternidad, se fue, confesando su dolor que no fue casual.
Sacrificó su permanencia, más no su obra, sus versos han quedado para siempre en el espíritu de esta tierra bendita a la que amó con todo ímpetu.
Luis, has encumbrado tu nombre en el signo de la historia, eres nombrado en algunas sentencias con "Eres la enamorada del gringo y del gitano, ?oh poeta de amor, de "Surcos de sol" y de "Llamarada", tu ausencia sentida, centinela dormido, en el infinito de tu sueño, estás en el trino, en el nocturno de la noche, en el alba de cada día.
Silencioso desde tu dimensión de luz, probablemente permanezcas en una plática junto a otros vates que ya no están. En esta noche fría de otoño junto a la ventana y viendo el cielo constelado, con júbilo expreso, ¡Luis, el del poema La Fundación de Oruro, está vivo".
Referencias:
Certificado de Nacimiento
de Luis Mendizábal Santa Cruz
Certificado de Defunción
Datos de Consuelo Canedo de Mendizábal
Diario La Patria
Poema inédito del poeta
Luis Mendizábal Santa Cruz
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.
