Los minerales consignados entre principales productos exportables

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De acuerdo a los informes del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en torno a las exportaciones nacionales de la gestión pasada (2017), se consignan el gas natural, el zinc y la soya como los productos que tuvieron demanda superior en los mercados externos, representando entre los tres el 54,8 por ciento de nuestras ventas internacionales por un valor de 7.095,8 millones de dólares en la gestión pasada.

Según los datos del INE, el pasado año el gas registró el mayor porcentaje de ventas al exterior por un valor de 2.049 millones de dólares, le siguió el zinc con un registro de 987,1 millones de dólares y la soya en tercer lugar con 855,6 millones de dólares, configurándose la venta como la principal en materia de exportaciones nacionales.

Observando ese movimiento de la producción minera, el componente prioritario de los metálicos como el estaño y el oro, y los minerales de zinc, plata y estaño, hay la seguridad de que incentivando tales rubros, la minería alcanzaría un mayor nivel, tanto e igual de importante como el gas.

Lo que falta según se advierte son mayores inversiones especialmente para las tareas de prospección y exploración minera, con el propósito de establecer nuevos yacimientos mineralizados que vayan asentando su producción, para sumarse a la que todavía por algunos años, aunque en franca declinación, siguen entregando las denominadas minas tradicionales.

La estadística del INE establece que el Brasil es el principal comprador de los productos bolivianos, gas, minerales y alimentos, por un valor de 1.367,6 millones de dólares, el segundo comprador de la producción boliviana es Norteamérica con 964,5 millones de dólares y la Argentina nos compra por un valor de 807,8 millones de dólares, como otra prueba de que el gas y los minerales, suman los mayores ingresos por exportación.

EL CASO DEL ORO

Hay que añadir un dato importante y es que el departamento de La Paz, se ha convertido en el mayor productor y exportador de oro en nuestro país, situación que lo ubica en el segundo lugar de exportaciones mineras, luego de Potosí que está en primer lugar y antes de Oruro, distrito que se mantiene en materia minera por la producción del sector estatal, el distrito de Huanuni y la Metalúrgica de Vinto por su producción de estaño metálico.

La referencia establece que un promedio de 42 toneladas de oro generó el departamento de La Paz en las últimas gestiones, aunque un viceministro, tiene dudas sobre las cifras y señala que la producción de oro en La Paz es de muchas más toneladas, haciendo suponer que "hay una venta ilícita" que favorece a ciertas cooperativas mineras, aun así, la exportación de oro, se anota como rubro importante de las exportaciones de minerales bolivianos.

Después de Potosí, las exportaciones totales en el rubro minero de La Paz alcanzaron 1.400 millones de dólares, de ese monto el oro contribuyó con 67 %, otros minerales con 15 % y demás productos con el 17 %.

La demanda de minerales y metales de Bolivia al mercado de Europa, tienen principal destino en Bélgica con un monto mayor a 300 millones de dólares. En el caso de Asia, la China concentra el mayor valor de compras con 478,9 millones de dólares.

El dato más reciente señala que los precios registrados en gran parte de la gestión mantuvieron un valor favorable, no hubo mayores declinaciones y tanto el gas como los minerales permitieron una producción con cierto equilibrio en los costos de producción, aunque disminuyeron los volúmenes de exportación.

FINANCIAMIENTO E INVERSIONES

Con las muestras que se observan en función de la producción de minerales y metales, sin incluir el oro de La Paz, como elemento que eleva los índices de exportación, está visto que en las exportaciones, la suma del zinc con 987,1 millones, el oro metálico con 742,8; mineral de plata que vendió 625,1 millones y el estaño metálico con 295,2 millones, totalizan 2.650,2 millones de dólares, que superan a los 2.049,10 millones de dólares que logró el gas por sus ventas, tanto a Brasil como la Argentina.

Con esa perspectiva, según los expertos es muy importante que se tomen decisiones especiales para alentar una verdadera política minera, que exija un mayor flujo de contribuciones por parte del Estado, especialmente para la prospección y exploración minera, abriendo la posibilidad de inversiones externas, para nuevos emprendimientos mineros, como está sucediendo con el litio y el hierro del Mutún, estos dos últimos proyectos, considerados como los de mayor envergadura en la visión minero metalúrgica del país.

LO QUE FALTA

Cuando avanzamos en el quinto mes del año, tan rápido que estaremos muy pronto señalando un primer semestre de actividades, volvemos a preguntar cuáles son las causas, motivos y razones, para que desde el 2014, pues el 28 del presente mes se cumplirán cuatro años de promulgada la Ley 535 de Minería y Metalurgia y que hasta el presente carece de reglamento, lo que impide su correcta aplicación para definir e impulsar una verdadera política minero-metalúrgica del país.

Expertos y analistas, se debaten en grandes dudas, sin encontrar una razón valedera que postergue por tanto tiempo (más de tres años) la reestructuración de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), otrora la empresa más poderosa del país, actualmente la menos efectiva y carente de estrategias adecuadas para motorizar lo que reiteramos muy a menudo y que debería ser un proyecto de "reactivación minera". Parecerían simples detalles y sin embargo son la clave de la nueva minería tan decantada y al mismo tiempo desamparada en su proyección.

Medios. Agencia Uru. PM.