Carta de García Meza responsabiliza a Banzer y Arce por el golpe del 80

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La carta póstuma que dejó el fallecido dictador, Luis García Meza, responsabilizó de gran manera al ex presidente, Hugo Banzer Suárez y Luis Arce Gómez, por los hechos suscitados en el golpe de Estado del 1980 de quienes habría partido la orden de matar al líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz.

Fue el abogado de García Meza, Frank Campero, quien la jornada de ayer reveló el contenido del escrito describiendo lo que realmente habría sucedido aquel año, que a la actualidad es recordado como uno de los pasajes más oscuros de la historia de Bolivia.

En un fragmento dice "lo tenía que soportar en mi casa, mañana, tarde y noche (a Banzer), pidiéndome hacer el golpe de Estado porque Marcelo Quiroga Santa Cruz le seguía un juicio (de responsabilidades) de manera seria".

"�?l (Banzer) parecía muy amable (�?), pero ordenaba a sus seguridades de Gobierno de facto que mataran a Marcelo Quiroga", señala.

En su carta incorpora términos como "traidor, "mentiroso" y "chismoso" para referirse a algunos camaradas. "Yo no maté ni robé, ...todo lo que pasó el año 80, no toda la culpa es mía" afirma.

Recuerda al general Waldo Bernal Pereira como su Comandante de la Fuerza Aérea pero también responsable de la Aduana Nacional, con viajes de La Paz a Miami y que luego se compró una isla en España con un yate privado y que ahora vive feliz en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra con su granja de pollos. Lamenta que la justicia lo haya condenado solo a 2 años de prisión.

También cita a su exministro de Defensa, Armando Reyes Villa, padre del prófugo Manfred Reyes Villa, quien recibió un año de privación de libertad y como no había cárcel, no cumplió y salió libre. García Meza lo llamó ministro "mentiroso" porque durante el juicio de responsabilidad había indicado que fue sobrepasado en su autoridad.

También acusa a Reyes Villa de haber escogido junto a Hugo Banzer la fecha del golpe de 1980 y cita a Víctor Paz Estenssoro como los ordenaron a la acción contra la Central Obrera Boliviana (COB).

Con ello, el ex general reafirma su inocencia sobre el asesinato de Marcelo Quiroga Santa Cruz.

PRESO POLÍTICO

En otra parte del documento, el ex dictador se declara "preso político" y denuncia diversos "atropellos" que sufrió en la cárcel de Chonchocoro, donde asegura que el ex ministro de Gobierno y actual embajador de Bolivia en la Organización de las Naciones Unidas, Sacha Llorenti, al mando de un grupo de oficiales violentó los candados y chapas de su celda cuando él se encontraba recibiendo atención médica en el hospital Cossmil.

El exgeneral, dice en su carta póstuma, que Llorenti sacó de su celda, 2.000 dólares de un ropero, el dinero estaba destinado para su abogada; dos relojes de marca, dos grabadoras, cortaplumas que, según relata, eran sus instrumentos con los que escribió su libro "Yo Dictador", un juego de ajedrez, entre otros objetos.

"A tanto llegó el odio, que me hizo sacar hasta la ropa interior y demás enseres personales, todo con la autorización del Régimen Penitenciario, es decir por el señor Llorenti", señala.

Asegura que ese mismo día ordenaron recluirlo en una celda de 3 X 3, donde solo entraba su botellón de oxígeno.

Por su parte, Sacha Llorenti no tardó en emitir respuesta ante lo afirmado por medio de su cuenta de Twitter, asegurando que el fallecido exdictador contaba con varios privilegios en la prisión y durante su gestión como Ministro de Gobierno hizo retirar los mismos.

"Lo mínimo que los medios deberían hacer es pedir contra parte o revisar sus archivos. García Meza vivía con privilegios inaceptables: tenía un departamento `CON SAUNA´ en Chonchocoro. Eso fue lo que se le sacó", indicó.

Fuente: LA PATRIA/Agencias