Huanuni, un distrito minero estatal comprometido con su producción

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La Empresa Minera Huanuni (EMH), se constituye en la más importante del sector estatal y pese a las contingencias que alteraron su ritmo productivo en gestiones pasadas, debido a la caída en el precio internacional del estaño y la dificultad para sostener la mayor planilla minera del país, Huanuni salió adelante y actualmente está esperando el funcionamiento del ingenio Lucianita, para cumplir el proyecto de incrementar su producción a 3.000 toneladas diarias de estaño.

ADVERSIDAD Y PERJUICIOS

Pese a esos problemas, los trabajadores de Huanuni, dolidos por el impacto del "extraño accidente", volvieron a sus labores habituales, no sin antes plantear formalmente a las autoridades de minería, la adopción de mayores medidas de seguridad para garantizar la vida de los trabajadores, insistiendo además en una rápida investigación sobre lo sucedido, para que no queden dudas que agrandan las especulaciones sobre motivo o causas de la explosión en interior mina.

EL ROBO DE MINERALES

En la mina de Huanuni, para establecer la referencia a la estructura exterior del rico yacimiento del cerro Posokoni, los trabajadores mineros reconocen que la acción del "juqueo", robo de minerales, es un mal que data de muchos años, pero que lamentablemente se incrementó en el último tiempo, aumentando el perjuicio a la empresa y el peligro a la seguridad de los trabajadores. En el último hecho se menciona la hipótesis de que la explosión hubiera sido provocada por ladrones de mineral. El caso está siendo investigado.

PRESIDENTE DE COMIBOL

Sobre este delicado problema, el ex ministro de Minería, ex directivo de la estatal minera y actual presidente de la Comibol, José Pimentel, afirmó que "la tercera parte de la producción de la mina Huanuni se va para el "juqueo", lo que significa que el robo de minerales constituye el mayor daño que se causa a la EMH".

Según el ejecutivo de la Comibol, se trabaja "en un plan represivo para evitar la comercialización de los minerales", agregó que "ante todo son decisiones de carácter político", una explicación que deja muchas dudas sobre la situación, las acciones directas que deberían aplicarse para frenar la incursión de los "jucus" en los parajes de interior mina y el complemento sobre la aplicación de un plan "represivo" para controlar la comercialización de minerales.

Para los observadores del tema, la declaración del ejecutivo de Comibol, deja una terrible duda, cuando asegura que hay decisiones políticas, dejando entrever que en ese contexto, no se hará nada para combatir directamente en el distrito la depredadora acción de los "temibles jucus".

La medida de reprimir la comercialización de minerales, resulta un complemento a las acciones de tipo policial y control que deben cumplirse en el terreno de los hechos delictuosos, pero parece que "las decisiones de carácter político" están por encima de las medidas que deberían redoblarse para frenar el "juqueo".

CIFRAS EN MINA HUANUNI

Las cifras que se obtienen con las actividades productivas en Huanuni, ratifican que en la gestión 2017 el distrito cerró su actividad con una utilidad de 20 millones de dólares, de acuerdo al informe de su ejecutivo sindical, relievando el compromiso de los trabajadores de coadyuvar con los ejecutivos y administrativos para cumplir metas de producción, recuperar las pérdidas pasadas y asegurar mayores utilidades, una vez que se incremente el volumen de producción con el ingenio Lucianita en funcionamiento.

Cuando Huanuni trabaja regularmente, asegura una provisión importante de concentrados de estaño con destino a la fundición de Vinto en Oruro, considerándose que las entregas suman el 62 por ciento de lo que utiliza la metalúrgica en sus operaciones, lo que completa con un 27 % que provee el distrito de Colquiri, completándose el cupo de asignaciones para Vinto con el 11 % que proviene de las cooperativas mineras. El dato significa que la EMH, recibe la mayor parte del presupuesto de Vinto por la provisión de concentrados.

LUCIANITA SIN FUNCIONAR

La referencia tiene que ver con el ingenio denominado Lucianita que todavía no funciona. Una información de principios de año, señalaba que hasta fines de abril o principios de mayo se realizarán pruebas en vacío del nuevo ingenio, pero entonces se esperaba que para este tiempo estaría listo el nuevo "dique de colas", complemento fundamental para el funcionamiento del ingenio. Dirigentes sindicales de la EMH, señalaron al comenzar el año, que había un avance mayor al 90 por ciento en el trabajo físico del dique, pero tal parece que lo último que faltaba no se completó de acuerdo a las previsiones estimadas.

Otro informe más reciente, de marzo pasado, aseguraba que el ingenio Lucianita comenzaría a operar a principios de este mes de abril, sin embargo, algunos imponderables seguramente retrasaron esa posibilidad y el ingenio que significó una inversión mayor a 50 millones de dólares, sigue siendo una costosa muestra de irresponsabilidad en la mina de Huanuni, tomando en cuenta que las imprevisiones en su construcción, incluso bajo supervisión técnica contratada para efectos de control de efectividad, no tomaron en cuenta algo que constituía la base del proyecto, provisión de agua. No era posible pensar en un ingenio sin agua.

Más de tres años de su inauguración y el año y meses que significó su implementación, el ingenio que tendrá capacidad para procesar 3.000 toneladas de concentrados de estaño por día, sigue a la espera de convertirse en pieza útil en la estrategia productiva de Huanuni. Nadie ha puesto el punto sobre las íes para establecer responsabilidades sobre la increíble omisión de no consignar agua que alimente el ingenio. El perjuicio por ese detalle es impresionante y Huanuni merece recuperar el daño que todavía perjudica su producción.

Medios. PM