Entre la voz del pueblo y la de una ideología fracasada

En los prolegómenos de la celebración de la VIII Cumbre de las Américas, se viene observando un fenómeno muy interesante, la presencia de plataformas de colectivos ciudadanos y de movimientos "sociales", ambos con el objetivo de intervenir en la misma pero con perspectivas cuando menos diferentes.

Empero valga la pena aclarar cuál el significado y la intencionalidad de la VIII Cumbre de las Américas.

Primero que nada se trata de un encuentro entre los países de las tres Américas, encuentro que tenía como destino la consecución de líneas de trabajo en la política internacional y la concertación en objetivos específicos del mismo escenario, vale decir que es un espacio de intercambio y consenso, además de diálogo.

Asimismo, se resalta también el aspecto de la situación interna de Venezuela que ya se puede definir como un colapso societal, o colapso social, con la práctica destrucción de la institucionalidad en beneficio de los intereses de un partido político (Es interesante que en otras latitudes esté por pasar lo mismo) así como una gravísima crisis humanitaria producto del más absoluto e irresponsable manejo de recursos de un otrora país rico.

Amén de la crisis global en el Medio Oriente y los conatos de confrontación armada mundial o que al menos parece así.

Dicho esto extrapolemos la presencia de diversos grupos de activistas en la celebración de la cumbre, destacando la diferencia entre uno y otro.

Primero: cerca de 2.000 personas repartidas en grupos de partidarios de los nefastos regímenes dictatoriales pseudo socialistas de Cuba y Venezuela, grupos que pretendieron con bochornosos actuados el desprestigio y la credibilidad de la cumbre misma, todo en "defensa" de regímenes que ni de lejos representan la voluntad democrática de los pueblos, pero sí la de una ideología fracasada, corrupta y excluyente, que participaron de una paralela y totalmente innecesaria (Además de muy bien pagada) "Cumbre de los Pueblos", siendo protagonista de la vergonzante y mitomaníaca Marcha de los Pueblos.

Segundo: grupos espontáneos de ciudadanos venezolanos emigrantes por la crisis de su país y afincados en Perú, que viendo las mentiras y descaro del anterior grupo en su cumbre paralela y su "marcha de los pueblos", las falacias de sus consignas y sus bien pagadas vacaciones, protagonizaron jornadas de protesta con riesgo de violencia y confrontación contra los del primer grupo, la consigna de estos grupos esporádicos fue la de denunciar al mundo las mentiras de los regímenes de Maduro y Castro, así como la crisis humanitaria en Venezuela provocada por su mismo gobierno, además de la práctica ruina de la institucionalidad.

Tercero: docenas de bolivianos de colectivos ciudadanos y oposición al gobierno de Evo Morales, estos grupos denunciaron la situación de violación a las normas, la corrupción, la represión del Gobierno boliviano y sobre todo el respeto de los resultados del 21F de 2016, esta gente llegó hasta Lima luego de recorrer por tierra miles de kilómetros desde la ciudad de Santa Cruz de la Sierra hasta Lima.

Cuarto; movimientos "sociales" en número de 150 personas seleccionadas entre afines al partido de gobierno de Evo Morales, quienes viajaron por vía aérea hasta Lima desde Bolivia, contando presumiblemente con generosos viáticos y pasajes pagados por el mismo gobierno, revelándose el uso de recursos del Estado boliviano para financiar este tipo de viajes, siendo el objetivo de estos grupos el de participar en la Cumbre Paralela, con los mismos fines que el primer grupo.

Sin temor de la hipérbole, se hace una plena identificación de la intencionalidad de los grupos presentes en Lima, obedeciendo a una clara consigna política, los grupos de la "cumbre alternativa" de soslayar la realidad así como desprestigiar la cumbre misma

En este sentido llama poderosamente la atención la duda razonable de ¿quién financia la organización de la cumbre, así como los gastos de los casi 2.000 delegados?, lo cual lleva a otra pregunta, ¿estos delegados están comprometidos con la defensa de los hechos de corrupción de los gobiernos "socialistas"?

A este punto parece llegar la presencia de 150 dirigentes de movimientos sociales afines al gobierno de Evo Morales.

Entonces 2.000 defensores de las mal habidas fortunas de los actuales y pasados gobiernos, interpretan presumiblemente un papel de simples defensores de una ideología fracasada, máxime cuando acuden a la cumbre de Lima supuestamente en representación de los pueblos negando ser pagados.

Hipotéticamente, se pretende desmentir la realidad, una apremiante realidad de corrupción, latrocinio y vulneración de los derechos humanos, empero la realidad, siempre, superará la dorada ficción que el dinero robado a los pueblos quiere mostrar, como prueba, tenemos tanto la espontánea intervención de los indignados venezolanos refugiados en Perú al igual que los esfuerzos de nuestros compatriotas en Lima.

Ante la mentira del socialismo del siglo XXI solo la verdad nos hará libres, la verdad de los pueblos cuya voz, ni la plata o el plomo podrán callar.

(*) Asambleísta Orureño