Policía boliviana detiene a español y brasileño cercanos a narco desaparecido

La Policía Boliviana detuvo a un español y a un brasileño, al parecer familiares del presunto narcotraficante William Rosales Suárez, desaparecido hace un mes durante un tiroteo en el que murieron tres serbios y tres bolivianos, informaron hoy fuentes allegadas al caso.

El jefe de la policía de Santa Cruz, coronel Miguel González, y el abogado de la familia Rosales, Denver Pedraza, señalaron que los detenidos son el español José María Gutiérrez Gómez y el brasileño Alexandro Enrique Fonseca de Nicola.

Fueron arrestados en la noche del lunes, cuando circulaban en un vehículo de lujo por la ciudad oriental de Santa Cruz.

Según la edición digital del diario cruceño El Deber, las autoridades afirman que son cuñados del supuesto capo boliviano Rosales y fueron detenidos con armas que serán examinadas para ver si tienen relación con la matanza ocurrida el 14 de mayo pasado, en un área rural de esa región fronteriza con Brasil.

Agregó que hoy estuvo presente en la inspección que hizo la Policía al vehículo de lujo, en cuyo maletero se hallaron partículas de un "polvo blanco", presuntamente droga.

Los detenidos "lloraron" y "juraron" a la Policía que no están relacionados con el narcotráfico, ni con la desaparición de Rosales, según el abogado.

Comentó Pedraza que sospecha que el arresto de personas cercanas a Rosales puede ser parte "de una trampa" de algunos policías para evitar que siga la investigación sobre el caso, ya que hay agentes involucrados.

La Policía cruceña detuvo en relación con el tiroteo a un teniente y un ex capitán del mismo cuerpo, supuestamente implicados en la matanza de las seis personas que custodiaban a Rosales, incluidos los tres serbios, cuyos restos aún no han sido repatriados.

Según Pedraza, las investigaciones han permitido encontrar dos teléfonos celulares, ropas, un diente y parte de un hueso de cráneo que van a ser analizados para saber si son de Rosales, porque también se maneja la hipótesis de que fue asesinado.

En un principio, la Policía señaló que la desaparición de Rosales y la muerte de sus guardaespaldas era parte de un "ajuste de cuentas" entre bandas de narcotraficantes, perpetrado por pistoleros con la presunta intención de pedir un rescate de un millón de dólares.

Fuente: La Paz, 15 (EFE).-