Personal de Khana Marka dio la alerta y coadyuvó a la labor policial

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Una mujer y un varón, guardias privados de la empresa Khana Marka, fueron testigos del siniestro suscitado ayer en la avenida del Ejército y la calle Backovic, cuando una explosión presumiblemente de garrafa de gas, mató a ocho y personas e hirió a 40 más. Apenas pasó el hecho, ellos informaron a su superior y dieron la voz de alerta a las autoridades policiales para que intervengan.

El responsable de operaciones de Khana Marka, Carlos Paredes, indicó ayer por la noche que aproximadamente a las 18:30 horas recibieron un llamado por radio del personal designado al cuidado de los portones de la Backovic y avenida del Ejército. "Requerimos apoyo, hubo una explosión", habría sido el mensaje.

Inmediatamente la empresa privada encargada del control en los portones que se ubican a 100 metros de la ruta del Carnaval, dispuso el despliegue de varios de sus funcionarios; asimismo se alertó a la Policía sobre el siniestro, indicando que podría tratarse de un hecho de magnitud.

El ruido y la onda expansiva la hicieron estremecer y la asustaron. Inmediatamente se volteó y vio el cuerpo inerte de una niña pequeña; estaba casi destrozada y evidentemente sin signos vitales.

Aterrada, pero consciente de que cada minuto contaba para auxiliar a los heridos, que eran varios y estaban desperdigados por el sector, comunicó del hecho a su jefe y éste a su vez se comunicó con la Policía.

Inmediatamente llegaron varios efectivos de Khana Marka al lugar, para comenzar con las labores de auxilio y también resguardar el punto donde se produjo la explosión. Después llegó la Policía que se hizo cargo del levantamiento de los cuerpos y de continuar ayudando a la gente afectada.

Los guardias privados siguieron resguardando el lugar, colaborando de cerca a la Policía, puesto que el sitio donde explotó la garrafa, está a 100 metros de la ruta del Carnaval y por tanto existía congestión de vehículos y personas.

Fuente: LA PATRIA