Viernes 09 de febrero de 2018
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A 24 horas del desarrollo de otro carnaval en Oruro, para refrescar la memoria de las autoridades, acudir a la comprensión de los protagonistas del evento, danzarines y espectadores, dueños de casa responsables del armado de graderías, a comerciantes de diversos productos y al conjunto de personas que de uno u otro modo serán parte de un fabuloso movimiento de gente en una ciudad acogedora pero al mismo tiempo caótica, es bueno hacer un recuento de lo que no está permitido en el evento.
Con cierta anticipación aunque no la deseada formalmente se ha mencionado ciertas prohibiciones que son de cumplimiento general, como la venta y el consumo de bebidas alcohólicas en las proximidades y menos en la ruta del carnaval. Se anticipa que este año se sancionará drásticamente a los infractores. Por la enorme cantidad de visitantes, nacionales y extranjeros que observará una incomparable demostración coreográfica de baile y una riqueza admirable en los atuendos de miles de danzarines devotos, también está prohibido el juego con agua, determinación que se ampara en una resolución ministerial que instruye a las alcaldías y otras autoridades el control pertinente, evitando de ese modo el derroche del elemento líquido y la molestia de su indebido uso.
Fuente: LA PATRIA
