Si hay mentira en los medios ¿Será porque mintió la fuente?
07 feb 2018
Armando Mariaca V.
Hay preocupación y decepción en los medios de comunicación y en los periodistas por las aseveraciones del gobierno y su partido, en sentido de que periodistas y medios mienten y han creado "el cartel de la mentira". Estas acusaciones se repiten a cada momento porque parece haber la intención de que el pueblo así lo crea y, de tanto repetir las frases, se haga conciencia en todos que los medios de comunicación no dicen la verdad, no transmiten lo que ocurre en el país; que periodistas y prensa en general alteran las verdades y acomodan todo a sus intereses y conveniencias. El gran objetivo: que la credibilidad y confianza existente en el pueblo por la prensa boliviana desaparezcan y solamente se crea todo lo que dice el gobierno y su partido mediante sus propios medios.
Fácil, muy fácil es lanzar acusaciones cuando se pisan terrenos gelatinosos donde no hay estabilidad ni seguridad alguna como parece ser la situación del gobierno que ha mostrado mucha inseguridad en los últimos tiempos; pero, al lanzar semejantes juicios temerarios sobre los periodistas y la prensa en general - diarios, revistas, radios y televisión - hace que la colectividad, conjuntamente los acusados, pregunten: Si hay mentira y todo es falso en los periodistas y los medios ¿Será porque tergiversan las noticias, propalan falsedades y hacen creer lo que no expresan las fuentes que hacen noticia, las diferentes reparticiones del gobierno, los ministros, los componentes del Legislativo y toda la actividad privada?
El periodismo lo que hace diariamente es transmitir y reproducir, transcribir, mostrar, exponer lo que dicen el gobierno y su partido, lo que dicen e informan las entidades gubernamentales, lo que propalan los componentes de la oposición, lo que señalan las gobernaciones, las alcaldías y todo el sector público y privado. No hay intención alguna en los transmisores que son periodistas y medios para informar lo que no es, lo que no sucedió. El periodismo en el mundo sólo se basa en hechos, declaraciones, conceptos propalados y diseminados por los protagonistas de lo sucedido, por el gobierno y su partido, por las diversas entidades públicas y privadas.
Cabría preguntar: Si medios y periodistas con inclusión de editorialistas, analistas, escritores, etc. solamente son propaladores de la mentira, ¿Qué se puede decir de las fuentes informativas? ¿Quién o quienes juzgan a esas fuentes? ¿Quiénes han falsificado grabaciones con declaraciones que se transmiten por los medios? ¿Cómo, cuándo y por qué se "inventó" el triunfo mayoritario en el Referéndum del 21 de febrero de 2016? ¿Por qué, inmediatamente que pasó el referéndum que dijo NO, no se dijo absolutamente nada y, al contrario, se reconoció ese resultado que ahora, por intereses y conveniencias, se quiere desconocer y atribuir a la prensa el calificativo de mentirosa? Si las fuentes de información no dijeron la verdad, periodistas y medios lo hicieron igualmente; pero, ¿Cuáles los fines, las razones para ello? Finalmente, ¿Qué hizo el Tribunal Supremo Electoral cuando revisó los resultados y los dio a conocer, porqué no condenó ni expresó conceptos sobre las "mentiras"?
Por principio moral y por vocación de servicio y sentido de responsabilidad, los medios y los periodistas no mentimos, y si hay casos comprobados - como el de una prensa amarilla en el mundo - son excepciones. En todo caso, los medios creen en la buena fe, honestidad y responsabilidad de quienes hacen noticia y muy especialmente de las autoridades porque en la prensa y periodistas al creer en la buena fe de los demás hacen fe y confianza de ellos mismos.
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