Otra vez el país pierde la oportunidad de aprovechar buenos precios de minerales

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Cuando hay cierto tipo de presiones internacionales, generadas por la fuerte competencia de las industrias del norte o las europeas y estas en abierto trabajo de contener la irrupción de las potencias asiáticas, es que se produce un determinado control productivo en busca de equilibrar el movimiento de las importaciones de commodities y las exportaciones de orden industrial, generando en el mercado de países productores, como el nuestro, cierto movimiento de recuperación de precios, que a su vez permite equilibrar costos de producción y hasta lograr algunas utilidades que favorecen a la minería pública.

Es lo que está pasando en el tiempo presente en el sector estatal, con informes grandilocuentes sobre utilidades en los distritos de Colquiri y Huanuni. En el primer caso es una ratificación de un proceso que se cumple regularmente y genera buenos ingresos para la empresa Comibol, y regalías para los municipios donde se produce el hecho extractivo

Algo más de tres años atrás y antes de un bajón de precios que se prolongó por buen tiempo afectando a la actividad minera, se registró un largo periodo de buenos precios, que lamentablemente no fue aprovechado por las autoridades de área en el ministerio y en la Comibol, por lo mismo al producirse la caída de precios, la minería estatal carecía, como sucede hasta el presente, de un "Fondo de Contingencia" que permita sortear dificultades a la minería estatal, en tiempo de "vacas flacas".

Así como no se ahorró ni un dólar, tampoco se aprovechó el periodo para establecer un capital de apoyo que fomente el urgente trabajo de prospección y exploración de nuevos yacimientos, menos para impulsar alguno relativamente nuevo, como el caso Mallku Khota por ejemplo, u otros que se los menciona en algunos informes pero que hasta ahora no entran en la lista de nuevos emprendimiento mineros.

El hecho es que en función de tiempo, transcurre otro largo periodo en el que no puede definirse una necesaria "reestructuración" de la Comibol, planteamiento acertado de muchos expertos y de los propios trabajadores mineros, que a la caída de precios demandaron un cambio en la estatal minera que no es precisamente su "refundación", por constituir un proceso "inútil y burocrático" cuando lo necesario es cambiar su estructura interna y convertirla en una empresa que establezca políticas productivas y ya no programas de administración burocrática. Un simple detalle de caprichosa posición de autoridades mantiene a la minería nacional sin la posibilidad de establecer su nueva política productiva.

Por lo que se observa, incluso luego de conocerse detalles de una "rendición de cuentas", así llamado un informe de gestión, se establece que no ha habido nuevos emprendimientos en la minería estatal, que se sostiene gracias a la voluntad de trabajo de los mineros asalariados, que cumplen direcciones técnicas para mejorar el rendimiento de los ya "gastados" yacimientos, y en la perspectiva de encontrar opciones de diversificar las operaciones, aparte de esa situación rutinaria, no hay nada nuevo en relación a nuevos emprendimientos mineros.

Según el análisis de una ex autoridad minera, experto en la materia y muy concreto en sus apreciaciones, revela que no hay consonancia, entre un repunte del precio de minerales y la carencia de nuevos planes sectoriales en la minería estatal, cuando minerales como el zinc, plata, estaño, además de plomo, cobre y sobre todo el oro registran alzas en sus precios, resulta que no hay ningún nuevo programa que aliente inversiones o mejore las tareas que se cumplen en los tradicionales yacimientos estatales. No hay ningún programa que pueda considerarse como "llamativo y efectivo".

Lo que se lamenta es que una vez más puede perderse la oportunidad de encarar un proyecto minero revitalizador por falta de políticas mineras. Jorge Espinoza el experto en minería recordó que "el año pasado los precios incidieron en mejores recaudaciones, pero los volúmenes disminuyeron por lo que se habría ingresado a un periodo de declinación productiva, debido a que no se registraron nuevos descubrimientos de yacimientos mineros".

En el frente oficial se muestra optimismo en una situación excepcional que prevé "que el precio de los minerales seguirá en ascenso", y toma como referencia un dato que difundió el Banco Mundial (BM) señalando que (los precios) se mantendrán estables el 2018 debido al aumento de la demanda e indirectamente a la ligera recuperación de la cotización del barril de petróleo".

El titular de minería por su parte señala que en la gestión pasada (2017), se registró un aumento en volúmenes de producción en una proporción del 8%, mientras que el valor de los concentrados subió el 10%, mostrando por lo menos coyunturalmente que la minería está jugando un rol muy importante en la actividad económica de las regiones productoras.

Si bien tenemos dos puntos de vista, en ambos casos la relación hace referencia a periodos especiales de tiempo, por un lado sin aprovecharlo convenientemente y en la otra circunstancia sin asumir responsabilidades concretas, a falta de los instrumentos operativos que son parte de una política (minera) que no existe.

En todo caso preocupa aún más la demora en establecer condiciones favorables a la "reactivación minera", sabiendo según datos del ministerio de área, que la minería genera cerca de 180 mil fuentes laborales entre todos sus operadores, lo que incluye a la minería privada mediana y chica, la estatal y la cooperativizada.

Un dato especial del MMM refleja que cerca al 9% de la población nacional depende de la actividad minera, de forma directa o indirecta, tomando en cuenta los procesos de actividad minera, desde tareas de prospección, exploración, explotación y su comercialización. Si el dato estadístico es evidente, se trata de un sector productivo que merece mayor apoyo estatal para mantener ese nivel de servicio social, que en materia de empleo constituye la más importante del país.

Será importante que los ejecutivos del área minera asuman en la presente gestión la misión obligada de solucionar el caso Comibol, encarar la reglamentación de la Ley 535, definir reglas de juego y escalas tributarias con el fin de atraer inversiones que permitan encarar proyectos mineros de envergadura.

Medios. P.M.