Miercoles 20 de diciembre de 2017
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En lo que respecta al tema cívico, esta gestión estuvo caracterizada por la división del ente supracívico orureño, generando que Bryan Nigoevic y David Mollinedo liderando los dos comités existentes actualmente, cada uno asumiendo su legalidad, generando que la representación de la defensa de carácter cívico inclusive esté cargada de tintes políticos debido a los sectores que respaldan a cada uno de los dirigentes.
Cabe mencionar que si bien en junio y con la diferencia de una semana, se posesionaron a los dos Comités Cívicos, el accionar de ambas dirigencias fue dispar, esto debido a que Nigoevic de manera constante emitió diversos manifiestos y pronunciamientos sobre distintas problemáticas del departamento, mientras que en el caso de Mollinedo y su directiva no fueron muy protagonistas de los medios de comunicación, haciendo apariciones temporales, solamente para manifestarse sobre algunos temas como el conflicto de las terminales de buses o el Puerto Seco, sin embargo, ninguno generó que la población les dé la legalidad y legitimidad pertinentes.
ANTECEDENTES
Pedro Challapa, ex dirigente del Comité Cívico, al final de su mandato convocó a una asamblea de la orureñidad el 25 de abril, donde debía formarse una comisión de poderes que busque un congreso para la elección de un nuevo directorio del ente cívico, pero abandonó la misma indicando que no existía el quórum necesario.
Fuente: LA PATRIA
