"In memóriam"

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Faltaba poco para las 12:00 horas del 1 de Noviembre de 2017, todo estaba listo, tumbas muy bien adornadas con una serie de manjares entre masas, dulces y bebidas con un sinfín de simbologías de la cultura tradicional, pero lo que destacaba de un ritual así, eran las fotografías de grandes y nefastos personajes de la historia de Bolivia y del mundo.

De repente, el sol intenso del mediodía se vio acariciado por una fuerte brisa que emergió de la nada, y con ello llegaron los espíritus de esas almas olvidadas en esta época, pero que a su vez en su mayoría fueron recordadas por los estudiantes de Derecho, quienes obligados a obtener una buena calificación en la materia de "Pluralismo Jurídico e Interculturalidad", se esmeraron para presentar en grupo una buena exposición. No por algo invirtieron hasta dos mil bolivianos en ese "arte".

ROSTROS

Mientras el visitante contemplaba aquellas imágenes, al observar los rostros de algunos personajes, en el imaginario se escuchaba, pese al bullicio:

Recorriendo el lugar, el corazón captó escuchar las palabras del Libertador Simón Bolívar: "Más cuesta mantener el equilibrio de la libertad que soportar el peso de la tiranía", reflexión adecuada a estos tiempos en que Bolivia está a tan solo un paso de ese flagelo.

"Tal vez puedo errar yo mi concepto, pero desde ahora aseguraría que los que se quejan, o son hombres viciosos, o son turbulentos, o no son patriotas", mencionaba Antonio José de Sucre, fortaleciendo la idea de Bolívar. Y como respuesta para finalizar la idea de tiranía, Marcelo Quiroga Santa Cruz, indicaba: "Esto es pretexto para que me limpien", célebre frase que pronunció aquel 17 de julio de 1980, antes de ser eliminado por las balas de la "narco bota militar" de Luis García Meza y su "juntucha" de paramilitares angurrientos del poder y de la masacre.

TUMBAS

Y las frases continuaban de esos personajes, que se vieron interrumpidas por los rezos y oraciones, que a cada término se escuchaba decir:

"Que se reciba su oración", luego voces delgadas y gruesas, entremezcladas según el expositor: "Por favor, llévese estas masitas en recuerdo de las almitas", "Un vinito por la memoria de la almita", y situaciones que hacían vivir el momento en un mundo "surrealista", estacionado en plena calle del rectorado de la Universidad Técnica de Oruro (UTO).

De repente, pasos más al Norte, realmente se rompían los esquemas al ver una tumba, cuyas almas perdidas seguramente están en el infierno, por el daño que hicieron a la humanidad, como Fidel Castro, nefasto socialista que a título de "revolución", tiñó de negro a su Cuba.

U otro personaje con una cantidad inimaginable de muertes en su haber, no por algo se lo llamaba el "carnicero de la cabaña", como Ernesto Che Guevara. Así como algunos, que es un conjunto de pocos hombres que creyeron que al profesar una ideología, lograrían sus propósitos que en muchos de los casos, sólo dejaron llanto, dolor, pobreza y tristeza en su gente.

Todo aquello, estaba "in memoriam", muy fresco como si fuese ayer que pasó, con la llaga abierta. Esa situación era revivida por aquellos estudiantes, quienes decidieron recuperar la tradición boliviana retrotrayendo a la mente a aquellos personajes.

SIMBOLISMO

En la cabeza de la tumba, los astros el sol y la luna, representación que ilumina el camino de las almas; caballos y llamas, que se cree traen a las almitas a la Tierra; la escalera unión entre el cielo y este mundo, y como no podía ser de otra manera las tantawawas, (tanta=pan y wawa=niño o bebé), que no son más que muñecos hechos con masas y decorados con caritas que dan estética a la mesa, aunque otros afirman que es el cuerpo físico donde se alojarán las almitas durante las 24 horas que estarán presentes en la tierra.

Con ello, una variedad de masas, suspiros, bizcochos, empanadas, ofrendas, maicillos, entre otros.

A las almas no se les puede hacer faltar comida, según la costumbre se les prepara los platos que en vida les gustaba saborear, y obviamente como postre una diversidad de frutas, por la época caracterizada por la piña y la sandía. Sin dejar de lado las bebidas alcohólicas, también de la preferencia del difunto como explicó la estudiante del 1"D"5 de Derecho, Dana Uriburu Thomas.

Mientras que la estudiante del 1"D"1, Dayana Cáceres, justificó la presentación del armado de tumbas, afirmando que los dolientes siempre recuerdan a sus seres queridos, pero no así a los personajes históricos, motivo por el cual decidieron hacerles un tributo, "in memoriam".

Por su parte, el docente de la materia, Gonzalo Martínez, señaló que lo importante de la actividad era revalorizar las tradiciones, la cultura y las costumbres, para el recibimiento de las almas, recordando sus virtudes y sus defectos.

"Los estudiantes de Derecho, hicieron las tumbas con diferentes personajes. Tenemos que ver que las tradiciones tienen su presencia en el mundo, lo que estamos haciendo es contraponer algún otro tipo de cultura, Tenemos que valorizar lo que somos, hacia donde vamos y de dónde venimos, es eso fundamentalmente", culminó.

Fuente: LA PATRIA