Algo más de un mes parlamentarios de Oruro mencionaron su intención de propiciar una ley que declare prioridad el embovedado del canal Tagarete, y con ese instrumento allanar las dificultades que se presentan en la concreción de ese proyecto considerado quizá, como el más importante en materia de saneamiento básico en la ciudad, tomando en cuenta su extensión y la contaminación que se esparce en un largo tramo de su recorrido afectando a centenares de familias, lo que significa miles de personas.
No se trata sólo de ese desastroso problema, además el canal abierto es prácticamente la causa de una serie de problemas para el desplazamiento de motorizados entre los dos sectores de la zona Este, divididos por el pestilente emisario de aguas contaminadas.
Embovedar el Tagarete, no es un proyecto reciente, es una idea planteada años atrás por dirigentes cÃvicos y vecinales que capitalizó un alcalde municipal que sin embargo no pudo desarrollar todo el proyecto, porque los fondos con que contaba sólo le permitieron mejorar el puente sobre el canal que une las dos avenidas y la intersección del distribuidor vehicular que tampoco está concluido.
Este proyecto de embovedar el Tagarete deberÃa ser una prioridad para las autoridades por algunas razones, las principales, el cuidado de la salud de la población, pero por otra parte habilitar una necesaria conexión vial de varias calles que interrumpen su utilidad por la permanencia de un canal que dejó hace mucho tiempo de ser un rÃo.
Parlamentarios de Oruro anunciaron propiciar una ley para declarar como prioridad el embovedado del canal Tagarete, un hecho que por esa vÃa tendrá seguramente un apoyo financiero de nivel estatal, sin embargo es bueno recordar que ese proyecto ha sido analizado, evaluado, y logró un primer apoyo de orden financiero procedente de la Corporación Andina de Fomento (CAF), que de manera oficial cubrirá el 50 por ciento de los 88,7 millones de bolivianos que significa el embovedado de un buen tramo del canal, el saldo está autorizado para que sea cubierto con recursos del Municipio y la Gobernación.
Frente a un requisito de la CAF, para desembolsar los recursos comprometidos y que tiene que ver con el funcionamiento de una planta de tratamiento de aguas ácidas, para que las mismas no dañen en el futuro el embovedado del Tagarete, se estima necesaria la participación de la Comibol, con cierto presupuesto que permita solucionar la recomendación de la entidad financiadora y avanzar en el cierre del canal que habilitará una moderna avenida y la conexión vial de varias calles de la zona Este, cumpliendo además la función prioritaria de sanear el medio ambiente en el sector urbano.
Lo importante es que se agilite el trámite de la Ley, pues de lo contrario se ingresará en la espera de cumplimiento de una pesada burocracia que altera muchos planes de necesidad social. La responsabilidad corresponde entonces a la Brigada, las autoridades y el apoyo de las instituciones. El embovedado del Tagarete debe comenzar en esta gestión.
Fuente: LA PATRIA
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