Obras con estudios de impacto vial

Una exigencia que aplica la Alcaldía de La Paz y que debe cumplirse de manera general, empezando por la misma comuna, pero además por cualquier empresa que decida realizar obras de construcción, especialmente si las mismas son de magnitud, que tendrán cierta duración y alterarán la circulación de peatones y motorizados deben cumplir la obligación de presentar estudios de impacto vial.

De ese modo se precautela la seguridad y comodidad de los vecinos en cualquier sitio de la ciudad, con lo que se elimina la arraigada costumbre de iniciar trabajos de construcción de obras, sin tomar las mínimas previsiones para evitar malos ratos a transeúntes, vecinos de la misma calle, adyacentes a la obra o ubicados en frente, a ciertos metros de distancia del campo que será utilizado y que con seguridad abarcará mucho más de los límites de la propiedad en trabajo.

Las políticas de mejoramiento urbano, no sólo se aplican cuando terminan las obras, como sucedía hasta hace poco, ahora hay normativas que son exigibles con suficiente antelación al inicio de trabajos, de modo que con el tiempo suficiente la empresa constructora, el o los propietarios de la obra y los vecinos del sector conozcan con precisión las normas que deben cumplirse, y en el tiempo de los trabajos no deben alterar o complicar el buen uso de la vía pública.

La disposición paceña que debe ser imitada, se basa en principios de respeto a la colectividad, cuando se establece que "el espacio público es de todos los habitantes de una ciudad, áreas de superficie sobre las que tienen derechos las personas, obligadas simultáneamente a cuidarlas para el mejor uso comunitario.

La medida es parte de un proceso de avance técnico y legal cuando se trata de realizar obras de construcción que alteren el tráfico de personas y movilidades, que muy bien debería incluirse entre las normativas que merecen aplicarse para dar cierta tranquilidad, comodidad y seguridad a vecinos orureños, que actualmente sufren por la prolongada alteración en el uso de los espacios públicos que les corresponde.

Sin ir muy lejos, la obra municipal construida en la Villarroel y 6 de Agosto, que ya fue entregada dos veces, sigue sin uso, faltan obras complementarias y los vecinos de todo el sector han sufrido ya buen tiempo la incomodidad de tener al frente de sus domicilios obras de larguísima duración, que han alterado su modus vivendi, como si fuera poco, el problema continúa. Otro caso es el de la Av. del Ejército, donde se construye una vía sobre otra, donde las dos calles de circulación han quedado tan estrechas que ocasionan molestias, son peligrosas y su parcial interrupción durará bastante.

Hay otros casos digamos menores, donde empresas y/o propietarios utilizan las aceras y parte de las calzadas como depósitos de materiales de construcción, en un flagrante atentado a los derechos ciudadanos. Por lo que se sabe, ni las obras grandes, menos las menores, cuentan con autorización para uso de espacios públicos, tampoco tienen estudios de impacto ambiental, y menos los "nuevos estudios que deben aplicarse de impacto vial". Así son las cosas.

Fuente: LA PATRIA