Cómo legitimar la elección judicial

En estos días en que el tema de la próxima elección judicial ocupa la atención de la ciudadanía, es importante recoger los elementos de debate, que puedan abrir posibilidades de considerar el asunto con alta responsabilidad, sabiendo que el pueblo no puede equivocarse, si se trata de elegir a los altos magistrados en cuyas manos estará la responsabilidad de administrar justicia con responsabilidad e idoneidad.

Naturalmente que las experiencias valen y lo que aconteció en el primer intento de seleccionar magistrados por voto popular, fue una prueba que mostró de manera abierta y descarnada que "el poder político puede todo", pero que el resultado no siempre es el deseado y menos el esperado.

Como el proceso de selección de candidatos avanzó, no sin una serie de inconvenientes hasta llegar a la selección de casi un centenar de postulantes, lo que se plantea en documentos y una serie de apreciaciones vertidas por la ciudadanía a través de las redes sociales en un enorme marco de opciones, es que el elector pueda en diciembre próximo hacer uso de su derecho a elegir o desistir de hacerlo, expresando su sentir que debe respetarse democráticamente y en este caso, dando el valor que corresponde al voto blanco o nulo, que implica tácitamente un criterio ciudadano que pesa en cualquier balanza electoral.

Un ex vocal de la Corte Nacional Electoral, sugiere a la Asamblea Legislativa la incorporación de un par de reglas en la Ley 026 de Régimen Electoral, para dar legitimidad a las elecciones judiciales. La primera consiste en una clausula de participación señalando expresamente que para dar validez al proceso se necesita una participación mayor al 50 por ciento de la población registrada en el padrón electoral.

La segunda regla que será la más importante, establecerá que los votos válidos tendrán que ser superiores en número a los votos blancos y nulos, pues si estos últimos fuesen mayoría, se establecerá el rechazo ciudadano a los candidatos, por lo mismo las elecciones tendrían que ser invalidadas, respetando el criterio del electorado. Se podría dar el caso de que algunos candidatos tengan menos votos válidos que los que fuesen emitidos como blancos y nulos, significará que los rechazados no pueden acceder a los altos cargos de la magistratura.

Según el experto electoralista, es urgente que esas reglas sean incluidas en el instrumento electoral para evitar la elección de autoridades con afinidad al Gobierno. Se trata de una necesidad imperiosa que debe modificarse en la Ley Electoral, por lo menos para el caso de la elección de magistrados. Es una opción que el colectivo ciudadano la plantea de manera abierta, esperando que se respete el derecho de elegir o rechazar candidatos.

El proceso continúa en la medida que también persisten las dudas sobre la seriedad que quiera darse a otra elección de magistrados que en la primera experiencia significó, como lo han reconocido autoridades superiores del actual Gobierno, un verdadero fracaso. Lo ideal es que no se repitan hechos que vulneran los derechos ciudadanos en democracia.

Fuente: LA PATRIA