Sábado 09 de septiembre de 2017
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Hace ocho meses que perdí a mi esposa en un accidente, me siento muy deprimido, he pensado en muchas cosas, a veces he pensado que ya no hay nada que hacer en esta vida, ya nada me motiva. Quisiera desaparecer. Mi familia, es decir, mis papás, mis suegros me apoyan, pero nada me inmuta.
Nos casamos hace tres años y la verdad ella no quería tener hijitos aún, pero resulta que cuando se accidentó estaba embarazada. Y perdí a mi hijito también.
¿Qué hago?
Respuesta:
Lo más inmediatamente posible, busca ayuda profesional.
Quizás en cuanto converses con alguien a quien puedas confiarle tus pensamientos, tus sentimientos e ideas, puedas encontrar un poco de alivio y esperanza para que puedas reencontrar la felicidad.
No pienses en desaparecer, no aún sin haber pensado que tu esposa no hubiera querido eso para ti.
El proceso de duelo debes hacerlo acompañado, sintiendo que tienes soporte, consuelo.
Trata de no aislarte de tus familiares, de amigos que te rodean. Conversa siempre con ellos.
Cada persona tiene su ritmo propio para llevar el luto. Sigue tu propio ritmo, sin embargo bajo la mirada de un profesional, es mucho mejor.
