Sin lugar a dudas, el crecimiento del denominado "parque automotor" en la ciudad genera un verdadero problema a la circulación de motorizados en las calzadas y de peatones en las aceras, ambos espacios muy reducidos, especialmente en el sector central de la ciudad, identificado como el "casco viejo", donde la circulación de vehículos y peatones se ha convertido en un verdadero caos.
Uno de los factores que induce a propietarios de vehículos, en su mayoría particulares, es llegar al sector central de la ciudad para cumplir una serie de gestiones, tomando en cuenta que las actividades públicas se concentran en edificios instalados en la Plaza Principal y algunos otros en inmediaciones del centro urbano, como el Palacio de Justicia, la Corte Electoral, por supuesto la Policía y la Asistencia Pública, además de varias agencias del sistema bancario, oficinas descentralizadas de salud y educación, juzgados desconcentrados y las dependencias de telecomunicaciones y telefonía, añadiendo a ese caótico "apiñamiento" de entidades, la ubicación de varios establecimientos educativos y una suerte de negocios ambulantes que completan el cuadro crítico del centro de la ciudad, donde realmente se hace muy difícil el parqueo de movilidades.
El problema es concreto, salvando pero sólo para beneficio sectario, el uso de todo el entorno de la Plaza Principal para el estacionamiento supuestamente "temporal" de vehículos oficiales, del municipio y de la gobernación, además de algunos otros en misión temporalmente oficial.
Frente al caos existente se aplican algunas prohibiciones para el estacionamiento de movilidades en varias cuadras del centro urbano, lo que obliga a conductores del transporte privado buscar, áreas de estacionamiento "temporal", que por supuesto no existen en el caótico sector central de nuestra ciudad.
Si de parqueos se trata, hay uno solo municipal que está en funcionamiento en la zona central a dos cuadras de la Plaza principal, pero con la mayoría de su espacio ocupado por contratos de uso permanente, por tanto con muy poco espacio para estacionamiento temporal, que en realidad es el tipo de espacio y servicio que buscan conductores particulares. Otros dos garajes de parqueo más reducidos, en el sector central, ambos en la calle Junín, no satisfacen la demanda de espacios para parqueo eventual.
Hay carencia de parqueos públicos y privados, una situación que complica seriamente a conductores de coches privados que al no tener espacios apropiados para lograr estacionar sus movilidades por tiempo reducido mientras cumplen trámites en oficinas públicas o financieras, están en la alternativa de dejar sus movilidades a muchas cuadras del centro o correr el riesgo de un estacionamiento ilegal y recibir la boleta de multa, porque para ese menester hay personal activo de Tránsito o de la Alcaldía, el asunto es sancionar al infractor.
Pero el caso que mencionamos, no se soluciona con disponer campañas en las calles, sancionando a "gil y mil" por estacionar sus movilidades en zonas restringidas, de momento los operativos constituyen un buen negocio para los "recaudadores", pero lo que se necesita es la habilitación de espacios en ciertas calles con el uso de parquímetros, además encarar la construcción de edificios específicamente para fines de parqueo, considerando que se trata de una buena inversión de réditos seguros en la que podrían participar emprendedores privados, aprovechando algunos incentivos que sean dispuestos por las autoridades comunales, en el orden tributario, en agilizar trámites contribuyendo de ese modo a disminuir el caos de congestionamiento vehicular en el centro urbano de la ciudad.
Fuente: LA PATRIA
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