Con rituales, Urus claman por agua para el "Poopó"

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Con la esperanza puesta para que el Creador y la Madre Tierra, atraigan a las lluvias para llenar nuevamente al lago Poopó, autoridades originarias de las comunidades originarias Uru de Puñaca, Vilañeque y Llapallapani, realizaron sus costumbres tradicionales con una mesa blanca que fue entregada al corazón del espejo de agua donde aún queda un poco del líquido elemento.

Una serie de confites, galletas, pequeñas montañas de azúcar con algunas banderillas en la punta, coca, singani y vino, fueron parte de la ofrenda que los originarios Uru prepararon con la finalidad de entregarlas a la Pachamama y así pedir ante el Creador que el lago vuelva a tener su dimensión original.

El ritual tradicional de los Urus se realizó ayer al mediodía en el sector de K`atahuini, donde se pudo encontrar el espejo de agua de la parte Este del lago, misma que tenía una profundidad no superior a los 30 centímetros.

En principio se llegó hasta el sector de Challavinto, donde se hicieron los preparativos para el ritual, "Ojala Dios y la Pachamama quieran que vuelvan las lluvias y retorne el lago Poopó", afirmó la alcaldesa comunal de Puñaca, Evarista Flores, pidió que las aguas vuelvan ya que los "hijos del lago" como ellos se denominan, sufren mucho porque ya no tienen su principal medio de subsistencia, la caza y la pesca.

Luego de los preparativos previos, el encargado del ritual, Felix Mauricio Zuna, junto a dos autoridades de las comunidades Uru, se trasladaron hasta el sector de K`atahuini, lugar donde se puede encontrar la orilla Este del lago (aproximadamente 10 kilómetros desde Challavinto, según datos del CEPA) y procedieron a efectuar la entrega de las ofrendas, esparciéndolas en las aguas del "Poopó" para que la Pachamama se alimente de ellas y en retribución pueda atraer a las lluvias.

Zuna explicó que se pide a los diferentes "aviadores" (deidades y cerros que circundan el lago) para que a través de ellos se pueda interceder al Creador para que el lago vuelva al volumen que tenía hace varios años atrás.

ESPERANZA

"Tenemos esperanza, el año pasado en este lugar ya no había agua, pero ahora se ve, aunque poco, tenemos que tener fe para que el lago retorne, los pueblos Uru estamos tristes porque ya no tenemos con que vivir por eso pedimos para que vuelvan los peces y las aves", indicó.

Uno de los periodistas que acompañó a los originarios hasta las aguas del Poopó, David Mercado, de la agencia Reuters, mencionó que haciendo el seguimiento de esta tragedia desde el 2015, se puede observar que hubo una leve recuperación del espejo de agua, "es un proceso muy lento pero alentador, ahora que hemos entrado al lago con las autoridades a medida que vas caminando en el barro ves plumas de aves y cuando el agua llega a los pies siente que empieza la vida, ves las parihuanas y es emocionante saber que todavía hay vida", señaló.

Félix Zuna mira al horizonte y al ver algunas nubes muestra una pequeña sonrisa e indica que la ofrenda fue recibida con agrado y que existe la esperanza de que el lago vuelva a ser la fuente de vida de los originarios Uru.

Fuente: LA PATRIA