Cuidado con la espiral inflacionaria

Como suceden las cosas en nuestro medio, la situación se complica seriamente para la gran mayoría ciudadana que ya está pagando el efecto del incremento en las tarifas de energía eléctrica en un 3%, pero multiplicado sin control oficial por el triple de gastos cuando se hace un recuento de todo lo que ha subido, bajo el pretexto de ese tarifazo por consumo de luz.

La espiral inflacionaria funciona al menor anuncio de reajustes de precios en servicios o en consumo de ciertas materias primas, como sucederá con el caso del gas industrial, cuyo valor tiene un aumento del 48 por ciento y cae sobre los hombros de los industriales nacionales.

Sobre llovido mojado, según el dicho, pero en este caso parece que funcionará a la inversa pues sobre lo mojado se desatará una lluvia de incrementos diversos, al haberse dispuesto un reajuste del 48 por ciento en el precio del gas industrial, con una directa incidencia en más de mil empresas nacionales que funcionan con gas.

El incremento vale para todas las industrias, pero tendrá una mayor incidencia en aquellas que tienen alto consumo del combustible, como el caso de las fábricas de cemento que son las que utilizan por encima de 30 mil pies cúbicos (MPC) al mes. Un detalle sobre la carga que soportarán las empresas las define en varias categorías, en función de cantidad de MPC mensualmente, lo que implicará un reajuste de precios en todas para compensar el fuerte recargo en precio del gas.

La situación puede tener derivaciones de conflicto social en los próximos días, toda vez que el organismo sindical de los trabajadores como es la COB, anunció su rechazo a la medida, señalando que la misma pone en riesgo miles de empleos en factorías que casi con seguridad no podrán sostener sus costos de producción con un presupuesto elevadísimo en su principal materia prima de producción.

Sólo como ejemplo, se mencionó el peligro para los trabajadores en el ramo de la construcción, que contendrá dificultades para mantener el ritmo de trabajo con una segura elevación de precios en el cemento. Otras industrias tendrán que reajustar costos y la necesidad de cubrir la diferencia, será cargada al precio del producto y ese factor alterará ineludiblemente al consumidor final.

La inflación aumenta sus círculos y las clases sociales, aún con un incremento salarial, regulado al crecimiento del PIB, no tendrá el efecto esperado de lograr un ahorro hogareño o tener efectivo para mayores compras, porque lo que subirán serán los gastos, reduciendo las otras opciones.

La medida ha sido aprobada, estaría en plena vigencia, aunque todavía hay una alternativa de que pueda variar el porcentaje del incremento, una vez que el sector del empresariado privado se reúna con autoridades de gobierno y expongan sus puntos de vista sobre la medida que ha sido aplicada sin consulta previa a los afectados y por lo mismo rechazada.

En la coyuntura actual los dos esquemas, el empresarial y el laboral, están en desacuerdo con disposiciones que alteran de manera directa la economía popular, pus no hay medidas que eviten las vueltas de la espiral inflacionaria.

Fuente: LA PATRIA