La Cooperativa de Teléfonos de Oruro (Coteor), que en sus inicios ofrecÃa solamente a sus socios un servicio de telefonÃa, hace ya varios años que ha incursionado también en los servicios de televisión por cable e internet ante los agigantados pasos de la comunicación digital que dejó casi obsoleto el antiguo sistema telefónico.
Como socio de larga data de esta cooperativa, uno puede afirmar claramente que los servicios ya enunciados si bien han tratado de estar dentro de las expectativas y avances tecnológicos que demandan los tiempos actuales, éstos no siempre están a la altura de dichas exigencias, especialmente en lo que respecta al servicio de televisión por cable, asà como internet.
En las gestiones de los últimos años, se podrÃa decir que ha habido un estancamiento, sino un retroceso, que en los recientes meses se ha agudizado de manera particular, con un servicio de internet bastante intermitente y lento, que llega a colocar a los usuarios -ante una necesidad tecnológica cada vez mayor de este servicio- a un nivel -tecnológicamente- atrasado.
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Hasta la fecha no ha habido una explicación clara, honesta, sin evasivas, transparente, de quienes conducen Coteor en lo que respecta a si la empresa proveedora del servicio de internet a la cooperativa en cuestión, es responsable de los frecuentes cortes, intermitencia o lentitud del servicio, o qué es lo que en definitiva pasa con la velocidad del sistema, ya que si hay un mal servicio del proveedor éste debe ser cambiado por otro proveedor, y suponiendo que hubiera un boicot tecnológico, ¿Por qué no se hace público?
También con el servicio técnico. Haga Usted la prueba, llame al teléfono de emergencias de internet de Coteor ante una falencia del servicio, y serÃa un milagro que le respondan, ni siquiera una grabación de voz, peor si es sábado o domingo. ¿Personal de emergencias?
Lo mismo respecto del servicio de televisión por cable. Cuando un socio contrata dicho servicio, lo hace en función de una grilla que se le ofrece, pero ocurre que con cierta frecuencia, se cambia la grilla, se modifica el sitio de los canales, se suprimen unos y se sustituyen con otros ¿A criterio de quién? ¿Un consultor? ¿Un experto? Con el resultado de que el único perjudicado es el socio de la cooperativa que paga para que los servicios sean eficientes, y que es multado cuando no paga.
Sin generalizar, porque una generalización serÃa injusta, ya que también hay en Coteor funcionarios educados, atentos y serviciales, uno se pregunta ¿Hay un personal cualificado para evaluar grillas televisivas, evaluar el servicio de internet, proponer mejoras efectivas, manejar los sistemas tecnológicos? Si Coteor no lo tiene, ha de buscarlo urgentemente, porque de lo contrario serÃa jugar a conducir una Cooperativa de este rubro. Y ha de buscar un personal cualificado mediante concurso de méritos. Una cooperativa, no es una empresa privada, ni un club de amigos.
Cuando concurrimos a elegir a los nuevos consejeros de Coteor, lo hicimos pensando en que algunos de los candidatos podÃan llevar eficientemente (no sólo honradamente) los destinos de la Cooperativa, sin embargo las cosas parecen no avanzar a mejores niveles de servicio a sus socios como ya apunté.
Una de las cosas que causó bastante malestar, fue la «nivelación» de dietas que verificaron los actuales consejeros a poco tiempo de asumir su gestión, explicando que éstas estaban dentro de lo legal, (dos salarios mÃnimos por sesión de acuerdo al artÃculo 73 del Estatuto de Coteor, haciendo algo más de 14.000 Bs.), cosa indiscutible, pero discutible dentro del campo ético, ya que la ética no consiste en el cumplimiento frÃo y abstracto de la letra. La ética va más allá. La ética supone sacrificio, renuncia, servicio y muchas otras cosas.
Cuando en una familia los recursos materiales escasean, todos los miembros de la familia se sacrifican, y se prioriza la atención de los más débiles, los niños y los ancianos. No puede ser que en tiempos de guerra el pueblo sufra hambre y los que mandan vivan a cuerpo de rey. Cada quien ha de sacrificarse en aras del beneficio común. Ergo, si los recursos de la cooperativa escasean para mantenerla a un nivel aceptable, ¿Ha sido ética una nivelación de dietas de los consejeros? Empero, estoy seguro que nadie harÃa reclamo alguno en este punto si los servicios de la cooperativa mejoraran.
Este fin de semana pasado, una gran parte de los usuarios de internet, nos quedamos sin este servicio, sin nadie que lo pudiera solucionar, y sin que nadie supiera informar a los socios afectados respecto de las falencias técnicas y humanas que evidentemente existen en dicho servicio. Lo que hace falta es gente competente en las diversas reparticiones de atención tecnológica. Y no se trata sólo del cumplimiento de un horario, se trata de responsabilidad. Sabemos que los fines de semana es cuando empeora el servicio de internet de Coteor. Prueba fue la larga fila en la oficina de Internet de Coteor este lunes a primera hora de la mañana.
Con mucho respeto hago una pregunta: ¿Cuál es la propuesta de los actuales consejeros para mejorar los servicios de nuestra cooperativa? Esa propuesta es la que esperamos los socios.
Como habÃa escrito el genial sacerdote argentino Leonardo Castellani: «La aguja pasa y queda el hilo. Lo polÃtico pasa y queda la moral. Pero si la aguja no tiene hilo, pasa la aguja y no queda nada. Claro que no se puede coser sin aguja. Pero mucho menos se puede coser sin hilo». Por eso me disgusta que le digan quirquincho al nacido en Oruro.
german_mazuelo_leyton@yahoo.com