Ambientalistas de Puerto Rico denuncian el almacenamiento de cenizas de carbón

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Grupos ambientalistas de Puerto Rico denuncian el riesgo para la naturaleza y la salud del almacenamiento de cenizas provenientes de la combustión de carbón para producir energía en una planta del sur de la isla, causa de manifestaciones y arrestos.

La polémica continúa, después de que durante la semana el municipio de Peñuelas se convirtiera en el epicentro de la atención mediática en Puerto Rico, donde los intentos de vecinos, activistas y representantes políticos de impedir el acceso de camiones con residuos provocaran arrestos y un despliegue policial que algunos catalogaron de desproporcionado.

Los manifestantes aseguran que el material que llega a la planta Peñuelas Valley Landfill (PVL) es nocivo para la salud y debería estar prohibido, mientras que las empresas responsables del proceso de almacenamiento y procesado de los residuos alegan que la actividad que llevan a cabo está permitida por la ley local y la federal estadounidense.

Las críticas llegaron desde todos los ámbitos sociales y políticos por el despliegue policial empleado, que supuso poner en la calle a cientos de agentes de Operaciones Tácticas, Arrestos Especiales e, incluso, helicópteros, un dispositivo que vecinos y ambientalistas aseguran no tiene sentido para diseminar a quienes trataban de impedir el paso a los camiones.

El secretario de Seguridad Pública de Puerto Rico, Héctor Pesquera, dijo que el despliegue se ajustó a las necesidades de la operación y que se trató de una medida para garantizar el paso de los camiones a la planta Peñuelas Valley Landfill, propiedad de la compañía EC Waste.

El presidente de la organización ambientalista Sierra Club capítulo de Puerto Rico, José Méndez, señaló este sábado a Efe que a pesar de que la empresa EC Waste y el gobierno de Puerto Rico aseguran que todos los procesos de llevan a cabo bajo la ley lo que realmente cuenta es que las cenizas de carbón provenientes de la combustión de carbón para la producción de energía que se depositan en Peñuelas son tóxicas.

"Son cenizas tóxicas y materiales letales que cuentan con elementos radioactivos", aseguró Méndez, para quien no hay certeza de que esas cenizas no terminen afectando al medioambiente y la salud de los vecinos.

Méndez indicó además que la ley que permite el depósito del material es ambigua y que de ello se han aprovechado estas empresas.

El portavoz de EC Waste, Ricardo Soto, dijo a Efe que las operaciones de la planta se llevan a cabo con todos los permisos pertinentes de las agencias federales estadounidenses y del gobierno local con responsabilidades en asuntos ambientales.

Una de las claves de la disputa es el contenido del material que es depositado en la planta de EC Waste de Peñuelas, el agremax, producto utilizado en el proceso de solidificación de los desperdicios líquidos que se envían a la planta para su tratamiento.

La Ley 40, recientemente aprobado a instancias del Ejecutivo que lidera Ricardo Rosselló, prohíbe el depósito en Puerto Rico de cenizas livianas o volantes por entender que pueden diseminarse con facilidad, pero no del agremax, una mezcla de cenizas livianas con otras denominadas de fondo que son más pesadas y agua.

Empresas implicadas en los procesos y el gobierno defienden que todos los procesos se llevan a cabo en cumplimiento con la normativa de la Junta de Calidad Ambiental (JCA) local y Agencia Ambiental de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), mientras que los ambientalistas insisten en que por mucho que se trate de un producto permitido por ley el agremax incluye cenizas nocivas.

Los vecinos y ambientalistas insisten que las cenizas livianas pueden llegar, vía aire, a las poblaciones cercanas y provocar daños ambientales y de salud, por lo que mantendrán los campamentos de protestas que tratan de impedir el acceso de los camiones que llegan con los residuos a Peñuelas.

Fuente: San Juan, 15 (EFE).-