Caso omiso a un clamor popular

La ejecución de tantas obras prometidas a nuestro querido pueblo de Oruro, por parte de las autoridades políticas y edilicias habría caído en un saco roto porque en vez de ejecutarlas se estarían haciendo simples parches o conversiones.

Primeramente nos referimos a la obra millonaria que se está efectuando en nuestra histórica plaza "Sebastián Pagador", convirtiéndola de plaza en un Parque de Diversiones o Aguas Danzantes, enmallado y donde el público para ingresar ha de tener que pagar.

No se han respetado la estatua de un gran héroe nacional como es don "Sebastián Pagador", relegándolo a un segundo plano. Deseamos recordar a las autoridades que Don Sebastián Pagador el año 1781 junto a don Jacinto Rodríguez se levantó en armas contra la dominación española, convirtiéndose en la primera insurrección indígena que a postre significó la liberación y la independencia de nuestro país.

Existe, otro caso que confronta la ciudadanía como es la inauguración de una nueva terminal, haciéndose un gran problema y sin solución a la vista. Gente inocente pagando los platos rotos y las autoridades esperando desde los balcones, cuando ellas son las que deben solucionar estos problemas de carácter social.

La historia nos demuestra que la Terminal de buses "Hernando Siles" ha sido construida por los orureños y para los orureños, como la única y mejor Terminal del país. Han pasado varios gobiernos pero ninguno ha dicho "esta boca es mía", a pesar de haber generado mucha economía, actualmente cayéndose ladrillo a ladrillo.

En tal circunstancia un grupo de transportistas en buses por una visión orureñista y por una fe hacia un futuro promisor, ven por conveniente construir una nueva y moderna terminal al servicio de su pueblo. En este estado de cosas nadie puede afrontar la solución de este problema, cuando la solución está en manos de nuestras autoridades.

¿Cómo y qué deben hacer?

Deben cumplir con su pueblo haciendo los siguientes trabajos:

UNO: La conclusión de una única avenida de Circunvalación que no tiene una iluminación adecuada, construcción de acepas y cordones, alcantarillado, pasos peatonales, verjas, arborización, retiro de escombros y basuras, retiro de talleres de soldadura y arreglos de vehículos, etc.

DOS: Arreglo y rellenado de calles adyacentes, construcción de cordones y aceras, iluminación y asfaltado y otros.

TRES: Arreglo y habilitación da la antigua Terminal con arreglo y pintado de fachadas.

CUATRO: Construcción y embovedado del río adyacente o Tagarete o río de aguas negras.

En otras ciudades modernas primero preparan el camino para usarla y no primero usaría y recién preparar el camino, como se quiere.

Otro hecho latente y que merece consideración y critica es el Carnaval, constituido por la Unesco como la Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, que se viene a menos por descuido de nuestras autoridades, sin embargo, son los señores devotos y bailarines, los dirigentes de los conjuntos quienes los mantienen vivos gracias a su fe y cariño y a su aporte económico personal y conservan nuestro patrimonio.

Finalmente, los orureños vivimos de ilusiones y de propagandas millonarias que nos hacen ver como la ciudad más grande y moderna. Nos han impuesto como una gran necesidad, la construcción de dos pasarelas en las avenidas Villarroel y Ejército Nacional. A la fecha la primera se ha desactualizado porque ya no se tiene pasajeros ni carga de minerales para trenes. La segunda también impuesta, incluso, mediante enfrentamiento de juntas vecinales, no sabemos cuándo comenzarán ni cuando acabarán.

Nos atrevemos a mocionar estas pocas palabras a nuestros compatriotas y hermanos de Oruro, a pesar de ser considerados como los callados y que aguantamos todo.