Lunes 26 de junio de 2017
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Los ciudadanos que sufren las aberraciones jurÃdicas de los operadores de justicia, cada vez, se interiorizan más en los temas jurÃdicos debido a la indisimulable desconfianza. La norma jurÃdica y una ley por ejemplo, además de los enunciados gramaticales que, un buen abogado y más un juez deben analizar exegética y jurÃdicamente en forma exhaustiva y pausada, pues se trata de casos que implican el futuro social, económico y de estabilidad psicológica de la persona que se juzga. Después de este análisis, esta misma norma o ley contiene una implÃcita valoración jurÃdica, que es el segundo paso importantÃsimo y se explica enseguida.
Para proyectar mayor luz sobre el tema, se debe considerar que la norma jurÃdica siempre representa una conducta a cumplir y que esta conducta es algo que supera al mero hecho fÃsico, pues éste en sà no contiene ningún sentido de significación, por lo contrario, la conducta contiene siempre significación que reside en ella misma.
Ahora se advierte que la valoración jurÃdica comprende dos estimaciones: la positiva y la pura. La valoración pura interroga por el ideal jurÃdico verdadero que significa que se limita a la investigación jurÃdica y filosófica, porque se trata de un objeto existente más allá de toda experiencia y, por ello la respuesta sobre la verdadera justicia sólo tiene sentido cuando se apoya en una concepción metafÃsica general del mundo y de la vida, dependiendo de esta como la parte depende del todo. Por ello cuando un paÃs no propugna una buena justicia descontaminada, el pueblo sufre y hay desazón y recelo por todo servidor público que imparte justicia o investiga.