La festividad religiosa del Corpus Christi (en latÃn), o el Cuerpo de Cristo para nosotros, representa la institucionalización de la EucaristÃa y significa recordar el cuerpo y la sangre de Cristo que se llevó a cabo un jueves durante la última Cena cuando Jesús compartió el pan y el vino con sus discÃpulos señalando que eran su cuerpo y su sangre, que se entregarÃan para el perdón de los pecados.
La principal finalidad del Corpus Christi, es proclamar y aumentar la fe de los católicos en la presencia de Jesucristo en el SantÃsimo Sacramento, dándole de tal modo el culto de adoración que motiva la renovación de la fe y la esperanza en el Hijo de Dios, que resulta personificado en la Hostia Sagrada que se eleva en la ceremonia de la misa y se la entrega a los fieles durante la comunión.
En el caso concreto de nuestro paÃs, con algunas variantes especiales de acuerdo a las regiones, se conmemora con una misa, procesiones, y tiene la virtud de unir a las familias en torno a "platillos especiales", el consumo de frutas de temporada, y lo principal, tomar en cuenta la reminiscencia de la Ã?ltima Cena, cuando Jesús convidó a los apóstoles el pan, su cuerpo y el vino, su sangre para que en el correr del tiempo esos elementos sigan siendo la parte más importante de la EucaristÃa, en función de reunir a las familias en una comunidad de paz y amor, de entrega a la fe que nos recuerda el sacrificio del Hijo de Dios, su resurrección y la Ascensión al Reino Eterno.
En materia de historia, la festividad del Cuerpo de Cristo proviene del siglo XIII con la celebración eucarÃstica que recuerda la presencia de Jesús entre los hombres y que se ratificó en diversas formas, milagros, y las versiones de sacerdotes como Tomás de Aquino que fue el impulsor de profundizar, el hecho de reconocer la presencia de Dios en la exposición, bendición de la hostia y su elevación en la parte central de la liturgia.
Para el mundo católico, este dÃa es de alta significación en la rememoración del último encuentro de Jesús con sus doce discÃpulos y la recomendación de que en el tiempo venidero se tenga al pan como la representación material de su cuerpo, y el vino, de igual modo, como su sangre divina, señalando: "haced esto en conmemoración mÃa"Â? y asà sucede con la reafirmación de fe, cada año, en este dÃa especial, reconocido e institucionalizado en el mundo cristiano.
Que este nuevo reencuentro de los católicos en el dÃa del Corpus Christi sea una verdadera reafirmación de fe, de unión y de esperanza en la familia boliviana.
Fuente: LA PATRIA
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