Quinua del occidente frente a la competencia del oriente

Los productores de la tradicional quinua del altiplano occidental del país, que han estado esperando un apoyo decidido por parte de autoridades nacionales para incrementar sus cultivos, mejorar sus cosechas y encarar la industrialización de su producto, se enteran de manera oficial que el "el grano de oro de los Andes" se producirá también en las tierras del oriente boliviano.

Que existen proyectos de investigación en medio centenar de países y que en algunos han logrado ya obtener quinua, aunque reconociendo que la misma carece de todos los atributos nutrientes de la quinua boliviana, el tema era de cierta preocupación entre los agricultores quinueros nacionales, esperanzados en que difícilmente lograrán en el exterior igualar al producto boliviano.

Sin ir muy lejos, la competencia desatada en el Perú, mostró otras características de producción aumentando el número de cosechas por año y rebajando el precio del producto, un golpe que se sintió en estos lados y que ocasionó perjuicios a los exportadores de la quinua altiplánica.

Se trata según una versión periodística, de una investigación privada que da sus primeros pasos, apuntando a producir el grano andino en suelo cruceño y con miras de triplicar el actual rendimiento promedio de los cultivos del occidente.

Un ingeniero agrónomo es el promotor del emprendimiento, señalando que se trata de una investigación de años y aprovechando circunstancias climáticas como la sequía en una provincia cruceña, que facilitó realizar el experimento de lograr un cultivo alternativo que además se lo considera "tropicalizado", habiendo logrado una producción de 1,9 toneladas de quinua por hectárea siendo que el promedio de producción del grano en el altiplano es sólo de 800 kilos, según la referencia del profesional empeñado en producir quinua oriental. No se conocen detalles de la calidad de la quinua oriental y si la misma mantiene sus condiciones nutritivas, que según algunos expertos son parte de las condiciones excepcionales de las tierras altiplánicas.

Algo en lo que insiste el promotor de este proyecto, es que en la zona oriental, la planta puede desarrollarse dos veces por año, a diferencia de lo que ocurre en el altiplano y como lo reconocen los productores andinos con una sola cosecha anual lo que los coloca en seria desventaja.

De aquí en adelante, el asunto deberá ser examinado a nivel del ministerio respectivo, una vez que las organizaciones quinueras de productores pongan en tapete de discusión el tema de la competencia oriental que pone en riesgo la supervivencia de centenares de productores altiplánicos, entendiendo que para el altiplano la quinua es un medio de vida.

La circunstancia sirve para replantear al Gobierno la necesidad de apoyar con mayores créditos a los agricultores del sector occidental, de manera que alcancen mejoras en el rendimiento de sus cultivos de la quinua real, la que además es la única que mantiene sus grandes atributos nutricionales, como ya se comprobó frente a otros intentos de producir quinua fuera del país.

Fuente: LA PATRIA