Diversificación productiva

Un planteamiento considerado muy importante surgió en días pasados en el sector del empresariado privado, propiamente en la presidencia de la Cámara Nacional de Comercio, puntualizando que en Bolivia es necesaria la diversificación productiva y el desarrollo integral de la economía, en razón a que el país requiere generar tasas de crecimiento mayores a las actuales.

En una serie de apreciaciones sobre el comportamiento económico nacional, el empresariado considera que su desafío es elevar el PIB per cápita (ingreso por persona) de 2.700 a 5.500 dólares hasta el 2025, a un promedio anual de crecimiento del 7%, con una inversión del 25% del PIB. Se asegura que "en el último quinquenio el sector empresarial ha invertido un promedio del 19% de nuestro PIB".

Se menciona que en la última década el crecimiento de la economía se estancó alrededor del 4,5 por ciento e incluso en algún periodo retrocedió respecto al índice del 2013 cuando el PIB marcó 6.8 por ciento excepcionalmente óptimo y que se buscará repetirlo.

El planteamiento formal del sector empresarial dirigido al Gobierno, señala la necesidad de trabajar unidos, con esfuerzos conjuntos para modificar los índices de los próximos años, además de encontrar soluciones a los problemas que han afectado por mucho tiempo al sector productivo nacional. Se sugiere una inversión planificada para diversificar la matriz productiva, un aspecto que favorecerá el crecimiento armónico de los sectores privado y estatal.

Para que estos buenos propósitos lleguen a buen término, el sector privado plantea la necesidad de que el Gobierno mejore el clima de inversión existente en el país complementando tareas conjuntas entre ambos sectores, además de facilitar el uso de mejores canales de coordinación para eliminar todos los obstáculos que interfieren las inversiones.

Se reconoce que el crecimiento de la economía en los últimos años fue de un 5 por ciento, más o menos sostenible, en función a la macro economía que se logró con recursos de un periodo positivo para las exportaciones nacionales, lo que permitió mejorar factores como los de consumo y la demanda interna, aunque persistieron situaciones especiales, según los observadores, con el sostenimiento de la política monetaria que coloca al sector industrial y comercial del país en desventaja frente al factor valorativo del dólar en los países vecinos, además de la permisibilidad de efectuar ciertas importaciones, que también generaron abierta competencia con la producción nacional, esos son algunos contrastes que deben eliminarse para alcanzar el objetivo de un trabajo conjunto entre Gobierno y Empresa, dirigido a la diversificación productiva.

Es importante que se tomen en cuenta las propuestas del sector empresarial privado como una manera de mejorar coordinadamente los índices de producción, ampliando en su caso el movimiento de mayores inversiones que con adecuadas reglas de juego permitan crear más fuentes de empleo seguro, que es una de las prioridades sociales en el país.

Pasado el periodo de las restricciones por la caída de los precios internacionales de las materias primas, se presenta en la actualidad un repunte favorable para nuestras exportaciones, lo que facilitará la tarea conjunta de diversificar el esquema productivo nacional.

Fuente: LA PATRIA