Corsán dice que no hay razón suficiente para ejecutar boletas de garantía

El Grupo Isolux Corsán consideró que no existen razones suficientes para la anunciada ejecución de las boletas de garantía después de que su filial Corsán Corviam abandonó Bolivia de manera sorpresiva dejando inconclusa la construcción de la carretera Ixiamas-San Buenaventura y la hidroeléctrica Miguillas.

"Diversas instancias del Gobierno de Bolivia han manifestado públicamente su intención de ejecutar los avales vinculados a la central de Miguillas y las carreteras de ABC (Administradora Boliviana de Carreteras). Pero Isolux entiende que no existen razones jurídicas suficientes para proceder a tal ejecución", expresó la empresa internacional, mediante un comunicado de prensa.

Ayer (el miércoles), el ministro de Obras Públicas, Milton Claros, dio a conocer que rescindió contrato con la empresa española Corsán Corviam y ratificó la decisión de ejecutar sus boletas de garantía.

Sin embargo, Isolux también justificó su retiro de las obras. "Los equipos de Isolux se han visto obligados a retirarse de los emplazamientos de tales obras por razones de seguridad física de las personas, incumplimientos contractuales no atribuibles al contratista y eventos sobrevenidos en la ejecución de las obras que no han sido resueltos aún", destacó.

CASO

MIGUILLAS

Confirmó que la empresa ya recibió una comunicación de ENDE anunciándole la resolución del contrato para la construcción de la central hidroeléctrica de Miguillas, firmado el 2 de octubre de 2014 tras su adjudicación a Corsán Corviam Construcción S.A. Sucursal Bolivia mediante un concurso público.

Pero "esta resolución unilateral se produce sin que ENDE haya atendido a las alternativas que Isolux le ha presentado en sucesivas ocasiones ante la constatación de la imposibilidad técnica y material de ejecutar el proyecto tal y como le fue encargado en la adjudicación", remarcó.

Aseguró que estas circunstancias fueron trasladadas de nuevo por los responsables de la obra a ENDE mediante una videoconferencia el pasado 18 de febrero. El 22 de marzo el presidente de Isolux solicitó un encuentro con el ministro de Energía, Rafael Alarcón. La respuesta recibida, entonces, fue un oficio de fecha 24 de marzo, que anunciaba la intención de resolver el contrato en el caso de que las obras no se reanuden en un plazo de 15 días.

"Desde que se recibió esta carta, Isolux Corsán ha estado trabajando para plantear una solución amistosa. (Sin embargo) el anuncio de la resolución de contratos y la ejecución de las boletas de garantía no favorecen un arreglo que salvaguarde los intereses de las partes, incluidos los de las empresas subcontratistas y sus trabajadores", señaló.

CASO

CONSTRUCCIÃ?N

DE CARRETERA

En el mismo documento, la empresa indicó que en caso de la carretera adjudicada a Isolux por ABC y a los hechos acaecidos en las obras de Miguillas, "se ha sumado una situación financiera de los proyectos. (Pues) ABC retiene avales por 12,1 millones de dólares que deberían haber sido devueltos y adeuda otros 10,8 millones".

Entonces -según la empresa- "la falta de pago de ABC" provocó a finales de marzo que los acreedores del contratista procediesen a cortar el tráfico en la carretera Ixiamas-San Buenaventura y a bloquear los embarcaderos y los campamentos donde residían los trabajadores de Isolux.

"Los acreedores incluso retuvieron dos días a varios trabajadores en ambos campamentos. (Por tanto) dado el riesgo para la integridad física de las personas allí desplazadas, la empresa tomó la decisión de desmovilizar a su personal", reiteró.

Pero también Isolux ratificó su "voluntad negociadora", porque según su departamento de comunicación, desearía recibir de las instancias gubernamentales de Bolivia propuestas para poder dar solución a la situación de las obras en curso.

Fuente: La Paz, 20 (ANF)