Unidad en defensa de la democracia

Sin lugar a dudas la nota política sobresaliente de los últimos días fue la que surgió en parte de la denominada oposición, con una "Declaración Conjunta", así denominado el documento que lo suscribieron seis líderes políticos de partidos no alineados en la corriente oficialista, ex mandatarios presidenciales, un ex vicepresidente y ejecutivos de tiendas políticas, que propugnan entre todos la vigencia de la democracia, la libertad y la justicia.

El sentido de la "Declaración" resume, según sus autores el criterio ciudadano que no se escucha o se lee corrientemente, una especie de "gente sin voz" que la recupera cuando algunos protagonistas políticos ponen en el tapete del debate situaciones que de otro modo quedarían simplemente ignoradas.

Por ejemplo se hace alusión al �rgano Electoral, planteando que sea idóneo, es clara la censura por la judicialización de la justicia, se recuerda la obligación de exigir el cumplimiento del resultado del referéndum que le dijo no a pretensiones reelectoralistas, proponen también reglas claras para la futura elección de magistrados sin que el proceso tenga injerencia política alguna, además enfatizan en la obligación de defender unidos la democracia y las libertades ciudadanas.

Por las aclaraciones vertidas por los dirigentes políticos tras conocerse su "Declaración", se entiende que el acuerdo no significa ninguna alianza política, partidista o electoralista aunque así se pretenda mostrar a la unión de líderes opositores, que están todavía a más de dos años para proponer candidatos.

No importa cómo se observe el asunto desde el punto de vista del sector oficial, pues se trata de un hecho trascendental, recordando que en más de una década no se hizo ningún pronunciamiento de partidos opositores unidos como parte de un acuerdo en defensa de intereses ciudadanos. El caso registrado hace poco es un buen indicio de que la democracia participativa abierta puede y debe funcionar como parte de la propia Constitución y su valor intrínseco en defensa de la democracia y los derechos humanos.

Un resumen de la Declaración Conjunta recuerda que "La conquista de la democracia y la justicia fueron y son una permanente lucha histórica en la que el pueblo boliviano dio muestras inequívocas de tenacidad, sacrificio y heroísmo. Por ello cualquier acción destinada a alterar o sustituir la voluntad soberana del pueblo, tanto en la conformación de los órganos del Estado - Legislativo, Ejecutivo, Judicial y Electoral - como en la construcción de los valores y derechos inherentes a la democracia, es un atentado contra esa soberanía".

La declaración ha sido de conocimiento público y en la respuesta de variados matices que surgió en el plano gubernamental, se vislumbró la posibilidad de que se abra un debate entre las partes más representativas del Gobierno y de los firmantes de la Declaración Conjunta de socios demócratas. Ese paso fortalecería aún más la condición de alentar y respetar la democracia participativa. Debatiendo y hablando en libertad, se entiende la gente.

Fuente: LA PATRIA