19 de Marzo

"Una de las cosas que hacían grato el trabajo en La Patria, era que había buena amistad entre todos los redactores y entre éstos, los operadores gráficos, independientemente de sus edades así como de jerarquías o de diferencias de credo político u otros factores". Así escribió Luis Ramiro Beltrán, en su libro autobiográfico "Con la tinta de imprenta en las venas". Orureño, abrazó la noble causa del periodismo en éste periódico, y llegó a encumbrarse como el único boliviano; "Premio de periodismo Mac Luhan".

Empedernido en lo que conoce, era el principal a animador de los encuentros oficiales de la Asociación de Periodistas de Bolivia. Los periodistas debemos cultivar siempre la verdad, decía en las tertulias e inagotables jornadas de discusiones gremiales de esta organización. Lo extrañamos. Eran muy cálidos los encuentros con él, rebosante de sonrisa y un apretón de manos que transmitía la sencillez, modestia y la permanente preocupación por su sector. El buen talante le caracterizaba. Transmitía aquella sensación de la "buena amistad entre todos" que recordaba Beltrán, como señal positiva del buen periodismo. Hay que estar de buena "vibra", muy "sintonizados", es decir en armonía con todos, incluyendo la naturaleza para ejercer un buen periodismo, sin dejar el profesionalismo, decía.

La Patria, celebra, todavía con las auras del dolor, su 98 aniversario de fundación y en dos años más su centenario. Data de un 19 de Marzo de 1919. Su nacimiento fue producto del fragor reivindicacionista que no cambia hasta ahora, vinculado al anhelo de retornar a las costas del Pacífico. Es todo un periódico obrero, proletario, muy sencillo y "libre", como su fundador, Demetrio Canelas, quería que sea. De esa época, de sus primeros años, no siempre podemos recordar a sus primeros periodistas. La memoria es frágil. Uno de ellos, por ejemplo, Eduardo Ocampo Moscoso, otro, José Horacio Gordillo Caballero, fallecido, que en los años 40 fue jefe de informaciones y redacción. Le sucedió en el cargo, Rafael Peredo Antezana, ambos muy jóvenes. Cuenta Rafael, próximo a cumplir 95 años encerrado en su dormitorio rodeado de sus libros, que Demetrio Canelas le llamó de urgencia a Oruro pera asumir el cargo de jefe de informaciones ante la emergencia de Gordillo que debía cumplir servicio militar e iniciar estudios de abogacía en Cochabamba.

"Fui jefe de informaciones hasta poco antes de la transferencia del periódico a los señores Miralles y en mi haber tengo el privilegio y honor de tener entre mis dirigidos al célebre Luis Ramiro Beltrán", recuerda con cariño y nostalgia ese hecho y su paso por La Patria. Por su parte, Beltrán en su libro le nombra en el acápite; "Primeros jefes del muchachito.

El primer jefe de redacción que tuve fue un joven periodista de Cochabamba, Rafael Peredo, que me dio bondadoso trato, pero no tardaría mucho en dejar Oruro para volver a su tierra natal". Efectivamente, Peredo tuvo que retornar para incorporarse a "Los Tiempos", otro periódico fundado por Canelas. Gordillo también fue su jefe, al que le califica como "un despierto periodista". Moscoso, Gordillo, Peredo, están presentes en mi memoria porque trabajé con ellos. Marcelo vivirá siempre entre nosotros.

(*) Periodista