Las cosas no van bien para el sector de los productores de quinua, el famoso "grano de oro" que ahora se producirá con caracterÃsticas de alta competencia en otro continente y con muy serias condiciones de igualar la calidad nutritiva de la quinua real boliviana y en este caso la que se produce en Oruro.
Un problema se originó en la caÃda del precio de la quinua boliviana debido a la enorme competencia de la peruana que inclusive se obtiene en dos cosechas anuales, lo que no se logró de manera constante en nuestro medio, según se explicó por cuidar su calidad y no comprometer su valor nutriente, como sucedió en el último tiempo con la quinua peruana, más barata y menos nutritiva, de acuerdo a los análisis de especialistas.
El tema que es preocupante en nuestro medio parece no interesar mayormente a los competidores que se sienten satisfechos con los volúmenes de exportación que tienen en algunos mercados externos, en los cuales empero se reclama la calidad de la quinua boliviana, producto que no alcanza a cubrir la exigente demanda externa.
La investigación fue liderada por la universidad Kaust de Arabia Saudita, y participaron investigadores de las universidades de Washington en Estados Unidos, de Melbourne en Australia y de Kiel en Alemania, por lo que se supone que en esos paÃses hay adelantos sustanciales en el cultivo de quinua y la lógica predisposición de establecer los factores y valores de su condición nutritiva.
A partir de los resultados de esa investigación y de otros estudios, queda claro que el "grano de oro de los Andes", alcanzará una futura condición internacional en materia de producción y se supone con todos o por lo menos la mayorÃa de sus "ingredientes" que reconocidos excepcionales nutritivamente, han obligado a investigar semejante alimento que en un futuro inmediato será parte de la lista de productos altamente nutritivos, cultivados, industrializados y comercializados masivamente.
Según los investigadores, aún hay un detalle interesante y es el que tiene que ver con la "saponina" que contiene la quinua dándole un sabor amargo que en nuestro medio ya se elimina con procesos mecanizados aún tradicionales, pero sin alterar su condición natural.
Queda un detalle especial y tiene que ver con las caracterÃsticas exclusivas de terreno y clima, exclusivos en el mapa geográfico nacional y difÃcilmente de alcanzar similares condiciones naturales en otras latitudes, un requisito que seguirá dando calidad exclusiva a nuestra quinua. Una posición realista, aunque un tanto optimista.
Fuente: LA PATRIA
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