Warning: inet_pton(): Unrecognized address in /home/lapatri2/public_html/wp-content/plugins/wordfence/vendor/wordfence/wf-waf/src/lib/utils.php on line 28
Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 Adolfo Mier, Jorge Fajardo y la gestión de la memoria histórica de Oruro - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
En ella figura, entre muchos otros textos de igual valor histórico, una crónica reivindicativa sobre la gesta del 10 de febrero, fecha que por inexplicables motivos la historiación oficial republicana ignoró o pretendió ignorar, y que sólo gracias a otra gesta particular, proporcionalmente meritoria - la de Adolfo Mier y León -, logró ser restituida en su justa trascendencia para la historia boliviana.
"Oruro del Novecientos" denuncia el simplismo de los historiadores altoperuanos que consignaron el alzamiento de febrero de 1781 cual una secuela tributaria de la rebelión indÃgena de Tomás Catari y Túpac Amaru, obviando los pormenores y las contradicciones internas de una rebelión polifónica y compleja.
A decir de Jorge Fajardo, fue Mier quien descubrió, en el Archivo General de la Nación Argentina, la "Relación Histórica", tomo quinto, de la "Colección de obras y documentos relativos a la historia moderna y antigua de las provincias del RÃo de la Plata", del historiador Ãtalo-argentino Pedro de Angelis, que da cuenta de la verdad sobre el alzamiento en la colonial Villa de San Felipe.
La crónica de Angelis recoge el texto del manifiesto, quizá sin la grandilocuencia ni los arreglos retóricos de posteriores versiones laudatorias, pero con toda la contundente concisión de que fue capaz un sargento mestizo de clase media que trabajaba como dependiente y custodio de las Arcas Reales:
Fue el breve, parco y sencillo grito de un pueblo con hambre, de un dependiente de tesorerÃa indignado con la inequidad de un sistema colonial que succionaba hasta la ultima onza de metal del rico suelo de la Villa de San Felipe de Austria, mientras veÃa languidecer en la miseria y el hambre a sus habitantes.
Adolfo Mier en todo caso no quiso reivindicar para Oruro el origen genealógico de un patricio ilustrado, ni la paternidad de la sesuda inauguración de una era independentista bajo el guión de Von Humboldt y Voltaire. Mier restituyó, en justicia, la memoria del primer alzamiento contra la inequidad de un sistema de despojo que se derrumbaba en todo el continente, pero que tuvo que haber empezado en algún lugar.
La revolución de Oruro fue caótica, desorganizada, imprevisible, como lo son todas. De ahà que el agitador criollo que inició la revuelta para proteger los ingresos de la ciudad de la angurria realista, cayera muerto a manos de los indÃgenas insurrectos que le disputaron el control de la caja de caudales y la financiación de la subversión.
¡Oferta!
Solicita tu membresÃa Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del dÃa en PDF descargable.
- FotografÃas en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.